Carlos Sainz y Ferrari triunfan en el GP de México en un día de pesadilla para Red Bull

El español Carlos Sainz (Ferrari) ganó el domingo el Gran Premio de México de Fórmula 1, en el Autódromo Hermanos Rodríguez de la capital, donde Max Verstappen (Red Bull) quedó fuera del podio por dos penalizaciones.

Sainz logró su segunda victoria en la temporada -cuarta de su carrera- y llegó a la meta seguido por el británico Lando Norris, de McLaren.

El tercer puesto fue para el monegasco Charles Leclerc, de Ferrari.

A pesar del triunfo, Sainz quedó fuera de lucha por el título de pilotos, pero el 1-3 conseguido en Ciudad de México le permite a Ferrari subir al segundo lugar del Campeonato de constructores y desplazar a Red Bull al tercer puesto.

"Si hubiese podido escoger un sitio para ganar una carrera más con Ferrari, habría sido México. Sentí que este podía ser mi fin de semana", dijo Sainz.

La concentración de Sainz 

Un par de horas antes del inicio de la prueba, en el paddock se pudo ver al 'poleman' Carlos Sainz dar, con la concentración reflejada en el rostro, las últimas declaraciones previas a una carrera decisiva para él.

Más distentido, ya sin posibilidades de ser campeón, Lewis Hamilton (Mercedes) se paseó en un patín eléctrico para sumarse al desfile de los pilotos en autos descapotables.

En el desfile, el público brindó una gran ovación a Fernando Alonso (Aston Martin) como homenaje a sus 400 presencias en Grandes Premios de la Fórmula 1. El español se llevó como recuerdo un casco decorado con motivos de la cultura mexicana.

Al final del desfile, el local Sergio Pérez (Red Bull) desató la euforia en los aficionados. Ya asimilada la obligación de partir desde la novena fila, el 'checo' le prometió a su gente "darlo todo para tratar de terminar en la zona de puntos".

Verstappen ataca desde el inicio 

A Sainz le duró muy poco el placer de arrancar en la pole. Verstappen, que pasó desapercibido en los ensayos libres y que apenas destelló en la clasificación, adelantó al español en la primera vuelta.

Pero Sainz siguió muy de cerca la estela de 'Mad Max' y recuperó la punta en la novena vuelta.

"Estaba enojado por perder la posición al comienzo de la carrera y porque Max es muy difícil de superar, pero pensé 'no tengo nada que perder' y tuve la confianza para ganar", apuntó Sainz.

Después de ese rebase, Sainz y Leclerc se vieron beneficiados tras un par de toques entre Verstappen y Norris, los grandes protagonistas en la lucha por el Campeonato de pilotos.

Tras una investigación del incidente, Verstappen se hizo merecedor de una primera penalización de 10 segundos.

El neerlandés recibió otra penalización de 10 segundos por una salida de pista para sacar ventaja de su duelo con Norris.

Sainz se dedicó a dominar la competencia hasta hacerse de la victoria; Leclerc lo escoltó durante gran parte de la carrera, pero en la parte final salió de la pista y permitió el rebase de Norris.

Como consuelo, el monegasco de Ferrari se llevó el punto por la vuelta más rápida (1:18.336) en la 71.

Por su lado, Verstappen pagó las penalizaciones en el 'pit lane' y solo pudo terminar sexto.

Incidentes en la salida 

La carrera tuvo un inicio accidentado. En los primeros metros tras la largada hubo un impacto entre los autos del japonés Yuki Tsunoda (Racing Bulls) y del tailandés Alex Albon (Williams). Ambos salieron ilesos y abandonaron.

Los descartes de Tsunoda y Albon más el de Alonso por un problema en los ferenos, implicaban un ascenso automático para 'Checo' Pérez, pero pronto el mexicano recibió una penalización de cinco segundos ya que en la parrilla su monoplaza estaba fuera del cajón de salida.

En su intento por remontar, 'Checo' se trenzó en un duelo de alarido con Liam Lawson (Racing Bulls). El neozelandés pudo conservar la posición ante el ímpetu del mexicano, quien terminó último entre los 17 pilotos que completaron la carrera.

El argentino Franco Colapinto arrancó en la octava línea y terminó duodécimo. En el transcurso de la carrera, entabló una llamativa contienda con el australiano Oscar Piastri (McLaren).

Esta edición del Gran Premio de México terminó con nuevo récord de asistencia acumulada: 404.958 durante los tres días del evento para dejar atrás la cifra de 400.639 de 2023.