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Kyle Farmer es operado luego de recibir un pelotazo en la cara

Kyle Farmer, de los Mellizos, es atendido después de haber sido golpeado en la cabeza por un pitcheo en la cuarta entrada del juego contra de los Medias Blancas.

Kyle Farmer de Minnesota fue golpeado en la cara por una recta a 92 millas por hora el miércoles, un error aterrador del derecho de los Medias Blancas de Chicago, Lucas Giolito, que mandó al campocorto de los Mellizos a una cirugía oral para realinearle cuatro dientes inferiores y suturar las laceraciones en el labio inferior.

El manager Rocco Baldelli dijo que el diagnóstico inicial no reveló fractura después de que el lanzamiento de Giolito se cerró y noqueó a Farmer en la cuarta entrada. Inmediatamente Giolito se colocó las manos en la cabeza y bajó del montículo para caminar preocupado hacia Farmer, quien yacía tendido de bruces y así permaneció unos minutos mientras era atendido.

Eventualmente Farmer se reincorporó con asistencia y caminó lentamente rumbo a la caseta con una toalla presionada sobre su rostro y la cabeza agachada.

“No se escuchó caer un alfiler durante tres entradas. Fue un poco extraño en la banca”, dijo el bateador designado de los Mellizos, Byron Buxton y añadió: “Todos estábamos pensando más en él que en el juego, especialmente cuando algo tan horrible como eso pasa. Si tienes corazón, te preocupas más por la persona, que por el partido. Fue complicado terminar”.

Giolito quedó sacudido por la escena, también. “Es algo que obviamente me hace sentir muy, muy mal”, dijo. “Nunca quieres golpear a nadie”.

El manager de Medias Blancas, Pedro Grifol, le deseó a Farmer “una rápida recuperación”.

“Los muchachos están lanzando cada vez más fuerte”, dijo Grifol. “Lanzar en la zona es algo de lo que se ha tomado en los planes de juego en los últimos años”.

En una semana le van a retirar los puntos a Farmer y sus dientes serán nuevamente evaluados para posibles procedimientos adicionales, anunciaron los Mellizos más tarde el miércoles.

El hecho de que Farmer no sufriera una fractura, dijo Baldelli, fue “probablemente una clase de milagro”. El manager fue efusivo al valorar la forma en la que sus jugadores se concentraron para sacarles la serie a Medias Blancas con una victoria por 3-1.