Cuadrangulares serían escasos en el Clásico Mundial de Béisbol
Todos los estadios que albergarán la quinta edición del Clásico Mundial de Béisbol convergen en un entorno donde los menos beneficiados son los toleteros
Acción en el curso del encuentro de Cuba y Países Bajos. Foto: JIT Digital.
El batazo de cuadrangular, aquel que hace que todos se paren de sus asientos, podría volverse un recurso escaso en el cursante Clásico Mundial de Béisbol. El primer partido de la cita, efectuado entre las selecciones de Cuba y Países Bajos, pudo haber anticipado lo que estaremos viviendo durante el curso del mes de marzo.
Durante la segunda entrada de este duelo, el cubano Erisbel Arruebarrena hizo una conexión con todas las características de ser un vuelacercas: velocidad de 102.1 millas por horas, ángulo de golpe de 33 grados y distancia de 403 pies, aunque terminó en la zona de seguridad del Estadio Intercontinental de Taichung como un elevado de out.
El viento pudo haber tenido una alta responsabilidad para que un contacto de dichas especificaciones termine no causando daños, pero mayor es el contexto de una ciudad ubicada a sólo 112 metros sobre el nivel del mar (m s. n. m.), nobleza que permite menos recorrido de la pelota con los lanzadores obteniendo un agarre adecuado y, en consecuencia, rompimiento pronunciado de sus pitcheos. Este factor es compartido entre todas las sedes que albergan el evento.
En su caso, el Tokio Dome – campo de batalla entre los cinco integrantes del Grupo B en la fase de eliminatorias – presenta la dimensión de 400 pies desde el cajón de bateadores hasta el jardín central, y está ubicado en un territorio cuya media de altitud es de seis m s. n. m., incluso menor a la ciudad de Oakland en Estados Unidos, donde se encuentra el parque menos propicio para el éxito ofensivo en el escenario de Grandes Ligas: el RingCentral Coliseum.
Los campos citados coinciden en la misma parte: la baja elevación en sus localidades está llamada a inclinarse por favorecer la labor ejecutada de los lanzadores, puesto que el clima no presenta una anomalía como llevar la esférica a tener un largo recorrido.
Las ciudades de Arizona y Miami serán las que conglomeran a los Grupo C y D en los estadios Chase Field y LoanDepot Park, respectivamente. Y ambos, de igual forma, concuerdan con lo antes dicho sobre los parques asiáticos.
El primero, casa de los Diamondbacks en el ecosistema de las Mayores, tuvo el registro de park factor de 84 puntos para producir jonrones, es decir, fue peor a la media en un 16 % para conectar bambinazos entre las temporadas del 2020 a 2022. El segundo, localidad de los Marlins, registró una puntuación de 88 para conseguir vuelacercas, siendo también un ambiente desfavorable a lo que el promedio refiere.
Todos los estadios que albergarán la quinta edición del Clásico Mundial de Béisbol convergen en un entorno donde los menos beneficiados son los toleteros, motivo por el que no debería sorprender una baja ofensiva, sobre todo poca cantidad de batazos de vuelta completa.