Jorge Bonifacio: ¿Caso para descartar o todavía quedan pruebas?

El poderío de su bate aparenta desvanecerse con el pasar de los años; ser disciplinado desde la caja de bateo no se incluye entre sus modales aprendidos, y la errática defensa de su persona en los jardines sigue causando el mismo dolor de cabeza que el primer día.

Con todo esto, un juez tendría el fundamento suficiente para descartar que alguien siga manteniendo un puesto de titularidad, sin embargo, este no es el caso de Jorge Bonifacio en la plantilla de los Tigres del Licey, sin importar que su rendimiento continúe en picada de forma estrepitosa.

Tras fallar en dos de tres apariciones el domingo, el jardinero sigue sin mejorar lo que ha sido un camino de lamentos en cada participación de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional desde el torneo 2020-21 al 2022-23, lapso donde registra un microscópico .186 en promedio de bateo y .557 de OPS, conectando apenas 15 extrabases.

La cantidad muestral de este fatídico transcurso se remonta a tan solo 180 veces al bate, aunque es preciso destacar que, esta es la naturaleza de los torneos invernales, escenarios en los cuales las temporadas son de "volada".

El bateador derecho, de 29 años, no levanta cabeza luego de un rendimiento superlativo en el 2019-20, siendo para entonces protagonista de cifras como un promedio de slugging de .548, tras castigar el pitcheo del circuito con numeritos que cuantifican sus 17 conexiones de bases múltiples en un trajín de 31 encuentros de Serie Regular.

Retomando su rendimiento de tiempos más recientes, los resultados de Bonifacio en Ligas Menores parecen darle una lavada de cara a su expediente, a pesar de que no parece ser lo ideal.

Tras completar 112 partidos de la mano de los Filis de Filadelfia en su sucursal de Triple A, el espigado jugador se combinó para cifras dobles en cuadrangulares (15) y tubeyes (17), en cambio, esto no aparenta ser suficiente, evidenciado su pírrico SLG de .407 y un promedio de en base de solo .336.

¿Qué pruebas sí están a su favor?

Lo plasmado en estadísticas está hecho de una tinta imborrable, lo que bien se pone a favor del menor de los hermanos Bonifacio, quien creció con un desempeño notable dentro de la liga, además de tener una edad por la cual considerarlo joven en el espectro del béisbol y fuera de este.

Aunado al factor de su registro de nacimiento, la espera por su natural poderío sigue creando expectativas a su alrededor, a pesar de no mostrar ninguna semejanza con lo que fueron torneos destacables de su figura en el pasado.

En los últimos años, el nacido en Santo Domingo ha experimentado cambios en su postura desde el plato, como tal es el caso de la posición de sus codos y rodillas, aunque continúa sin disfrutar de frutos suficientemente dulces.

Mantener a Bonifacio en un rol de titular resulta costoso para los Tigres, pero el equipo parece esperar por la reivindicación de los porcentajes de este. La pregunta es: ¿Cuánta paciencia tendrán?, ¿Valdrá al final la pena? El tiempo responderá ambas cosas.