Béisbol

Dusty Baker busca ponerle un anillo a su carrera tras 25 campañas como dirigente

El dirigente de los Astros de Houston, Dusty Baker. Foto: Agencias AFP

Dusty Baker terminó siendo elegido para ocupar la vacante de mánager de los Astros de Houston previo a la campaña del 2020, retornando a los banquillos del deporte profesional tras una pausa de tres años.

Los Astros se convirtieron en el mayor enemigo de la opinión pública luego de caer al descubierto por el uso de tecnología para robar señas durante la temporada del 2017, por lo que contar con un dirigente experimentado lucía como la más astuta decisión del equipo para afrontar su crisis, originando la contratación del experimentado dirigente.

El oriundo de Riverside, California, ha catapultado la franquicia a la postemporada en cada una de las tres zafras desde que asumió el puesto de capataz, incluyendo dos clasificaciones seguidas a la Serie Mundial de Grandes Ligas, dándoles razones a sus superiores por las cuales estar contentos.

Baker, un ex manager del año en tres oportunidades, se ha encargado de ser el director de un perfecto filme que combina lo clásico de lo actual en los Astros, haciendo a la afición olvidarse de aquel mal sabor por el que atravesó el equipo.

Los Astros cuentan en su roster de 40 miembros con representantes de siete países distintos, diversidad de la cual han logrado grandes dividendos. Baker recibió una plantilla con jugadores de la estirpe de José Altuve o Alex Bregman, mientras ha visto en primer plano como jóvenes del calibre de Kyle Tucker, Jeremy Peña o Cristian Javier se consagran en el máximo nivel.

Salón de la Fama

El hombre de béisbol, de 73 años, ha estado ligado por cuatro décadas en rol de mánager dentro del ecosistema de las Mayores, quien con su éxito actual al mando de la novena de Houston, decora con los toques finales un pastel que se servirá en el Salón de la Fama de Cooperstown.

Tras 24 años de experiencia como capataz, Baker registra en sus columnas personales la marca de 2,093 victorias y 1,790 derrotas, aunado a tres clasificaciones al “Clásico de Otoño” en su carrera que, en caso de terminar con el campeonato desde que inicie la serie contra los Filis de Filadelfia el próximo viernes, haría su caso mucho más redondo para terminar en la inmortalidad del deporte.

Nacido cuando apenas Mao Zedong tomaba posesión de la presidencia de China o el surgimiento de la vida democrática en Alemania, Baker ha navegado con éxito y resultados dorados en cuatro décadas como dirigente, logrando ser competitivo desde las etapas antológicas y de las analíticas en el evolucionismo de su puesto.