PARA RECORDAR

La triste historia de Tony Conigliaro

El triste caso de Tony Conigliaro, el infortunado exjugador de los Medias Rojas de Boston, quien vio interrumpida su carrera con apenas 22 años y la cual estuvo arruinada pocos años después.

Inició su carrera en 1964 cuando apenas contaba con 19 años y su bate dejó sembrada en esa campaña una gran admiración en el mundo del béisbol.

En la campaña de 1965, el jardinero de Boston encabezó la liga en jonrones con 32 a los 20 años para convertirse en el jugador más joven en la historia en liderar ese renglón en Grandes Ligas.

Todo transitaba bien en su joven carrera, pero el viernes 18 de agosto de 1967 en lo que fue un día fatal en el Fenway Park, Jack Hamilton, de los Serafines de California ensayando un pitcheo “ensalivado” golpeó con gran fuerza alrededor del ojo izquierdo al joven jugador, quien cayó como si hubiera sido derribado por una descarga de un rayo... y ahí comenzó su viacrucis.

Conigliaro llevaba 20 jonrones cuando tuvo ese accidente y perdió el resto de la campaña y la de 1968 completa. Para retornar en 1969 y disparar 20 vuelacercas. En la jornada de 1970 conectó su mayor cantidad de bambinazos, 36 y también produjo su cifra tope de empujadas con 116.

Sorpresivamente, Boston lo envió en 1971 a los Angelinos, y con el disgusto de dejar a sus seguidores en la ciudad de Boston volvió a perder parte de su visión y abandonó el deporte de sus amores en esa misma estación. Un intento de regreso con los Medias Rojas en la temporada de 1975 culminó en fracaso.

El incursionó en la radio como comentarista de béisbol, pero en 1983 la desgracia tocó a sus puertas otra vez y el regalo envenenado que le dejó a él y su familia fue un infarto, que lo mantuvo en estado de coma hasta el sábado 24 de febrero de 1990 último día que estuvo en vida al fallecer a los 45 años. Esta es parte de la triste historia de un hombre que pudo haber sido uno de los más grandes jonroneros de todos los tiempos, Tony Conigliaro.