Los centros extranjeros dominan en la NBA

La NBA siempre ha llevado la voz cantante dentro de las ligas profesionales de deportes en los Estados Unidos en cuanto se refiere a la globalización de su negocio.

El proceso se inició a mediados de la década de 1980, se afianzó con el trabajo de David Stern como comisionado y se ha extendido desde el 2000 por todos los confines del mundo.

Asia, Australia, África, Europa, América Latina, todos los continentes y países han sido “rastreados”, sus jóvenes “escauteados” y muchos han logrado, por sus condiciones, talento y calidad, hacer realidad el “sueño americano” como es el caso de Giannis Antetokounmpo.

Una expresión de cómo se ha enraizado la influencia extranjera en la NBA es que en la posición de centro – devaluada en el baloncesto moderno de los lances de tres- la inmensa mayoría de sus mejores exponentes no responden a la nacionalidad de Estados Unidos.

Tomando en cuenta el liderato de eficiencia –estadística de última generación que es el resultado de sumar todo lo positivo y restar todo lo negativo-, la posición cinco es dominada por los extranjeros.

Nikola Jokic (Serbia, Nuggets, 55.9) es el número uno en sentido general. Es el MVP actual con posibilidades de repetir. Promedia 25.9 puntos, 13.7 rebotes y 7.9 asistencias.

Uno de los mejores pasadores en su posición en la historia de la liga, se acaba de unir a Wilt Chamberlain como los únicos que han repetido partidos en los que han conseguido un triple doble con al menos 25 puntos y han superado el 80 por ciento en acierto desde el campo.

Joel Embiid (Camerún, Sixers, 50.3) es el cuarto. Otro candidato sólido al MVP. Sus averages son de 29.3 tantos, 10.9 rebotes y 4.4 asistencias.

La ausencia del incomodado Ben Simmons -quien ha pedido ser cambiado y no ha jugado en toda la temporada, ha dejado la mayor responsabilidad del equipo en las manos de Embiid y ha sabido responder. Un jugador de casi siete pies con movimientos ofensivos que recuerdan a Michael Jordan y Kobe Bryant.

Karl-Anthony Towns (RD-USA, Timberwolves, 43.4). Ocupa la décima posición y sus medias son de 24.3 puntos, 9.6 rebotes y 3.9 asistencias.

Enlutecido por el fallecimiento en 2020 de su madre, la dominicana Jacqueline Cruz, Towns promedia además 2.2 lances de tres anotados por salida.

Rudy Gobert (Francia, Jazz, 38.6). Está en el puesto 21 con sus promedios de 16 tantos, 15.1 rebotes y 2.3 bloqueos.

Un perenne candidato al Jugador Defensivo del Año, el francés también está contribuyendo más en el costado ofensivo lo que hace más peligroso a su equipo.

Nikola Vucevic (Suiza-Montenegro, Bulls, 36.9). Se ubica en el lugar 30 con medias de 17.6 puntos, 11.6 rebotes y 3.6 asistencias.

Hace unos años reveló que intentaba asimilar su juego viendo a Al Horford en su espejo, pero su calidad le ha ganado un puesto entre los más destacados de la posición.

Jonas Valanciunas (Lituania, Pelicans, 36.1). Aparece en el número 33 con sus averages de 18.2 tantos, 11.7 rebotes y 2.6 asistencias.

Bam Adebayo (Estados Unidos, Heat, 35.3). Es el número 37 en la lista con promedios de 18.2 unidades, 10.1 rebotes y 3.5 asistencias.

Jarrett Allen (Estados Unidos, Cavaliers, 34.9). Ocupa el lugar 40 con sus medias de 16.2 puntos, 11.1 rebotes y 1.8 asistencias.

Deandre Ayton (Bahamas, Suns, 33.6). Está ubicado en el puesto 45. Sus averages son de 16.4 tantos, 10.5 rebotes y 1.6 asistencias.

Kristaps Porzingis (Letonia, Mavericks, 33.3). Tiene promedios de 19.2 unidades, 7.7 rebotes y 2.0 asistencias. Está en el puesto

Versatilidad. A diferencia de sus antecesores que limitaban su accionar a la zona restringida, los centros que dominan la liga en estos momentos son muy versátiles, encestan de tres y pasan la pelota.

Poder. Sin embargo, aunque pueden hacer ofensiva desde el perímetro, los jugadores de la posición cinco no descuidan sus tareas habituales de defender cerca del aro y ayudar en la captura de los rebotes.

Destreza. Estos portentos del baloncesto pueden manejar el balón, iniciar y terminar contraataques y moverse en la cancha con gran facilidad y velocidad, a pesar de que los que no superan los siete pies de estatura se acercan mucho y sobrepasan las 200 libras de peso.