TENIS
Medvedev se cita con Nadal en final de Abierto de Australia
Daniil Medvedev, N.2 del mundo, eliminó este viernes al griego Stefanos Tsitsipas (4º) 7-6 (7/5), 4-6, 6-4, 6-1 al término de un partido intenso y espectacular, y disputará el domingo ante Rafael Nadal la final del Abierto de Australia.
"Voy a volver a jugar contra uno de los más grandes jugadores y de nuevo contra un jugador que va a intentar conquistar su 21º Grand Slam", recordó el ruso aludiendo a su final ganada en el último US Open ante Novak Djokovic. En aquella ocasión privó al serbio de un 21º 'Grande' pero también de la gesta de conquistar los cuatro Grand Slams del año, después del Abierto de Australia, Roland Garros y Wimbledon.
El ruso de 25 años, finalista el año pasado en Melbourne y ganador del último US Open, puede convertirse en el primer tenista en la era Open (desde 1968) en conquistar de forma consecutiva sus dos primeros títulos en Grand Slam.
Naomi Osaka lo logró en categoría femenina cuando conquistó su primer 'Grande' en el US Open 2018 y después su segundo en el Abierto de Australia 2019.
Este viernes Medvedev dominó a Tsitsipas en un partido tenso y no exento de polémica. Hasta el punto de que el ruso arremetió verbalmente contra el árbitro en un cambio de lado.
Con un 5-4 para el griego, que iba a servir para igualar a un set, Medvedev recibió una amonestación por sus palabras.
Desde su asiento, interpeló al árbitro en estos términos: "¿Estás loco? ¿Por qué (esta amonestación)?", lanzó, remarcando al árbitro que él no dijo nada cuando el padre de su rival hablaba, según él, a su hijo.
"¿Y su padre puede hablar en cada punto? ¿Eres idiota?", lanzó antes de repetir en tres ocasiones alzando el tono: "¡Su padre habla en todos los puntos!".
"¡Respóndeme! ¿Su padre puede hablar en cada punto? ¿Cómo puedes arbitrar una semifinal de Grand Slam si eres tan malo? ¡Mírame cuando te hablo!", prosiguió.
En todo caso, el ruso no se distrajo y cerró el partido en dos horas y media, más o menos dos horas menos de lo que precisó para derrotar a Felix Auger-Aliassime (9º) en cuartos en cinco sets el miércoles.
Victoria de Nadal
El español Rafael Nadal se situó a una sola victoria del récord masculino de 21 Grand Slams al superar este viernes al italiano Matteo Berrettini para acceder por sexta vez a la final del Abierto de Australia.
El legendario jugador de 35 años se mostró muy sólido ante el joven italiano al que superó por 6-3, 6-2, 3-6, 6-3 en 2 horas y 55 minutos.
Después de meses apartado del circuito por lesión, en los que tuvo dudas de si podría volver, Nadal puede batir el récord de Grand Slams ganados por un tenista masculino y romper el triple empate actual que comparte con el suizo Roger Federer y el serbio Novak Djokovic.
Preguntado por la posible hazaña en declaraciones sobre la pista al terminar el partido, Nadal aseguró que para él lo importante es el Abierto de Australia, el único grande que ha levantado solo una vez (2009).
"Para mi, se trata del Abierto de Australia más que otra cosa", aseguró.
"Me siento muy afortunado de haberlo ganado una vez en mi carrera en 2009, pero nunca pensé que tendría otra oportunidad en 2022", indicó.
El español saltó arrollador a la pista Rod Laver, con la cubierta desplegada ante la intensa tormenta que caía en Melbourne.
La lesión degenerativa en el pie izquierdo ha obligado al balear a cambiar su estilo de juego, fortaleciendo el servicio y buscando puntos más rápidos. El rendimiento hasta ahora ha sido incuestionable, con nueve victorias y ninguna derrota en 2022.
Durante los dos primeros sets, Nadal percutió repetidamente con su izquierda el revés de Berrettini y contrarrestó con solvencia su saque y su diestra.
En menos de hora y media ya se había situado con dos sets de ventaja y había roto el servicio en tres ocasiones a su desesperado rival, finalista en Melbourne el año pasado.
Pero en la tercera manga llegó la reacción del italiano, que aprovechó un momento de mayor imprecisión en el saque de Nadal para romperle el servicio y forzar un cuarto set.
Aunque fue una última manga mucho más pareja que las dos primeras, el español se mostró más acertado en los puntos decisivos y aprovechó la primera bola de partido para asegurar el pase a la final.