MUJERES DE GRANDES LIGAS

“RICACHONES”

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CAROLINA CRUZ DE MARTINEZSanto Domingo

Es súper bueno vivir bien. El poder costearse el flow del momento, una ‘grasita’ en los pies, un bling bling, el degustar una comida exquisita, frontear un carrito último modelo…todo esto se siente bueno.

El que aspira a jugar profesional, sueña con todo esto. Es parte de los beneficios de jugar duro, entrenar fuerte y destacarse. Sin embargo aunque muchos entienden que esto los hará ricos, la mayoría ignora que ya lo son sin tener ninguna de estos elementos. La riqueza no consiste en los bienes que se posee, sino en saber reconocer quien uno es y el poderse administrar como es.

Los atletas son ricachones, no tan solo ricos cuando reconocen que cuentan con Dios Padre y no solo con ellos mismos. Los deportistas son ricachones cuando pueden mantenerse saludables, puros, ajenos a la maldad del entorno y fieles a Dios y a ellos mismos. Los atletas disfrutan de una riqueza extraordinaria cuando dentro de su limitación aprenden a valorar cada temporada y etapa. Los atletas son ricachones cuando cuentan con una o dos tipos de relación que no los mira como un símbolo de dinero sino más bien como un ser humano normal que necesita soporte, protección y amor.

Los ricachones no son aquellos que andan buscando impresionar a todo el mundo y no reconocen lo valioso que son sin importar su status financiero ni condición. Aquellos que buscan tapar inseguridades y heridas con adquisiciones de alta gama tristemente reemplazan sus riquezas internas con ese peligroso sentimiento de carencia; entran en un descontrolado espiral donde mientras más tienen, más cosas querrán y es un abismo que los controla pero ellos mismos no pueden controlar.

Los ricachones del profesionalismo son aquellos que sin tener las añadiduras del negocio ya son ricos. Ricos en salud, ricos en sabiduría, en inteligencia, en paciencia, en honestidad, en humildad, en prudencia y en integridad. Esas riquezas los harán mantenerse sin necesidad de caer en una pobreza espiritual, emocional y mental.

“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”

S. Mateo 6:33

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