SERIE DE CAMPEONATO
Otra decisión sobre pitcheo deja a Dodgers en coma
Los Dodgers pidieron demasiado a Julio Urías al enviarlo al montículo por cuarta vez en 12 días.
Aunque el mexicano fue el único pitcher que logró 20 victorias en las Grandes Ligas durante esta temporada, ha sido empleado por Los Ángeles en tres papeles distintos tan sólo en la última semana.
Tanto Urías como los Dodgers han enfatizado que estas misiones no son tan desafiantes. Pero el zurdo lució totalmente fuera de ritmo y distante de su precisión habitual en el cuarto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional ante los Bravos de Atlanta.
“Me sentía bien físicamente”, dijo Urías tras la derrota del miércoles por 9-2. “Sólo hay que darles el mérito a ellos por lo que hicieron hoy”.
Para el momento en que Urías se marchó de la lomita con una desventaja de cinco carreras, quedó claro que la exigencia había sido desmedida, y que los Dodgers no están obteniendo lo que esperan de sus pitcher principales en una rotación que parece un caos.
La dirigencia de los Dodgers está desacatando buena parte de las reglas tradicionales del béisbol durante octubre, en un intento por sacar el mayor jugo posible a su cuerpo de pitcheo.
Y ahora que los campeones de la última Serie Mundial están a punto de la eliminación, queda claro que esas decisiones no han funcionado como esperaba su jefe Andrew Friedman.
Tanto Urías como Max Scherzer tuvieron problemas en la Serie de Campeonato cuando se les pidió abrir con descanso de apenas dos días luego de lanzar como relevistas. Walker Buehler tampoco alcanzó su nivel habitual con descanso adicional.
Y ahora, los Bravos tienen una ventaja de 3-1 ante los Dodgers por segunda vez consecutiva en una Serie de Campeonato. Contarán con tres oportunidades para instalarse en el Clásico de Octubre.
Roberts negó que la alteración de las funciones y descansos de Urías haya causado sus problemas.
“Hay un costo potencial”, admitió sin embargo sobre el uso de un abridor como relevista. “Creo que nadie lo sabe... Para mí, lo importante es hablar con el jugador, con los lanzadores y ver lo que tenemos”.