Ofensiva por posición

Recientemente el receptor Salvador Pérez alcanzó la cifra de cuarenta jonrones disparados en la actual campaña grandes ligas. El acontecimiento provocó comentarios sobre los jugadores defensores de esa posición que han logrado esa cantidad de cuadrangulares. No obstante el venezolano no clasifica ya que de sus ya 42 batazos de cuatro esquinas, catorce fueron logrados como bateador designado.

Eso es así, en el béisbol, donde hay un tiempo para la defensa y un tiempo para la ofensiva y los equipos enfrentados nunca están al mismo tiempo en el terreno, el acopio de logros ofensivos por posición se registran según la que está defendiendo el bateador en el momento que lo consigue.

Con Fernando Tatis, Jr. ha ocurrido que su mudanza del campo corto a los jardines le impedirá colocarse como uno de los escasos torpederos que han disparado cuarenta o más jonrones en una temporada. Tenía treinta como parador corto al momento del traslado y ha conectado siete más, seis en función de jardinero y uno como designado. Lo que no entendí fue la explicación dada por los Padres del cambio de posición, expresaron que era para proteger su hombro de las lesiones; pero las veces que estas han ocurrido han sido como bateador, no desempeñándose a la defensa.

En este contexto hay que señalar hechos que han afectado los resultados vitalicios de muchos jugadores. El más notorio posiblemente sea el de Alex Rodríguez. Durante su estadía con los Marineros y los Rangers, disparó 345 jonrones, 344 como campo corto y uno en rol de designado. Se quedó corto por uno de la marca para torpederos que estableció Cal Ripken, Jr. Negociado a los Yanquis, pasó a defender la antesala y como tal conectó 287, además de 65 como designado y/o emergente.

Otro caso digno de mención es el récord que impuso Adrián Beltré como antesalista. Disparó un total de 3,166 incogibles en su carrera, pero como tercera base 2,987, cifra máxima para un resguardado de esa área; superó a Brooks Robinson que alcanzó 2,838 y le faltaron apenas trece para haber sido el único antesalista con tres mil.

Es obvio que le hizo falta participar en una temporada más para concretar la hazaña.