De menos partidos al mundo ideal

Ojalá haya sido solo por este año y debido a las limitaciones impuestas por la extendida pandemia del Covid-19, pero preocupa que los torneos principales -Santiago, Distrito Nacional, LNB- sean cada vez más reducidos.

El Distrital, por ejemplo, tuvo solo 7 partidos en su vuelta regular. Tradicionalmente eran 15 -cuándo equivalía a un nacional-, pero luego de bajó a diez.

La LNB, que llegó a disputar recientemente hasta 22 encuentros, ahora solo tendrá 14 sin coronar un campeón por circuito si no que avanzarán a los playoffs los mejores cuatro equipos de la vuelta regular.

Siete juegos es muy poco para un "superior" y mucho menos es 14 para una Liga Profesional. El básquet dominicano se sigue atomizando y eso no es bueno para su desarrollo.

En el mundo ideal tendríamos una fuerte liga de 5 ó 6 meses y como satélites los principales torneos de las provincias TODO AL MISMO TIEMPO. Sería una especie de Liga de Campeones como sucede en el fútbol europeo mientras las "ligas" provinciales desarrollan sus incidencias. Y podríamos tener una "segunda división" donde los campeones de las provincias un poco menos desarrolladas en el baloncesto luchen por un título que les permita "subir" a la primera división.

Pero para eso se necesitaría toda una reingeniería del calendario de competencia, un gran sacrificio por parte de todos los actores que intervienen en el baloncesto criollo y un gran desprendimiento que no sabemos si están en disposición de hacer. Pero de todas maneras soñar no cuesta nada.