"RAQUETEO"

En en el mundo de los atletas hay diversos manejos respecto a la naturaleza de lo que representan. Aquellos que se destacan se constituyen en patrimonios para sus familias, para su comunidad, su pueblo y la nación misma. Ser patrimonio significa que el atleta es un bien de gran estimación económica, cultural, histórica y de gran valor para si mismo y la sociedad. A raíz de ese valor, muchos se convierten en atractivos considerables para la comercialización en la industria deportiva y unos pocos logran transcender aún a otras industrias como el entretenimiento, la política, los negocios, entre otros.

Los atletas siempre tienen que tomar en cuenta el conocer la cultura local para saber como navegar. Si bien es cierto que por su habilidad y talento se convierten en productos codiciables, no es menos cierto que dentro de ese rio revuelto habrá ganancia de pescadores. El ‘raqueteo’ es intenso y no precisamente en pro de ellos.

El término raqueteo que proviene del inglés 'racket' significa soborno o intimidación, y de acuerdo al diccionario coloquial es la más alarmante y frecuente modalidad de delitos patrimoniales. El raqueteo es una práctica conocida en las instancias de abajo y las de arriba, empleada por pescaditos pequeños pero también por tiburones grandes que no necesariamente sobornan o intiman de manera violenta o con pistola en la cabeza, pero si logran trabajar finamente su mordida. Los mismos no se presentan como criaturas amenazantes o alarmantes, sino más bien como especies amigables que vienen a “añadir” o “sumar” a lo que ya está. Sin embargo el truco del raqueteo es precisamente eso, presentarse sigilosamente con el objetivo de asistir y servir para lograr la entrada patrimonial.

Quizás la palabra delito suene muy fuerte, pero lo cierto es que son muchos los patrimonios deportivos (atletas) que han sido estafados y mordidos. Son vastos y conocidos los boxeadores, baloncestistas, golfistas, futbolistas, que han sido burlados. El raqueteo trae mucho pesar porque el atleta casi siempre se da cuenta luego que empieza a sangrar, y ahi es ya es tarde para poder pelear.

“El pobre es odioso aun a su amigo; Pero muchos son los que aman al rico.”

Proverbios 14:20