Heredia aprovecharía vitrina en la selección
Pondera el promisorio futuro del equipo de mayores, toda vez que se trata de talentosos juveniles con un técnico como Jacques Passy.
Carlos Heredia Fontana, el “10” de la tricolor puede convertirse en sensación dominicana a partir de su paso por Wolverhampton de Inglaterra.
Su juego alegre y compacto, capaz de entregar los balones más letales, lo convierten en una pieza muy codiciada en el concierto internacional, razón por la cual Carlos Heredia pasa por la selección tricolor como vitrina que lo enclave en litorales de las mejores ligas.
Carlos Heredia Fontana, quien agota otra experiencia con la enseña nacional absoluta –amistosos ante Puerto Rico y Serbia-, hoy deambula irresoluto con una carpeta de ofertas que lo regresarían a Europa u ocupar una porción del 2021 en la LDF, como trampolín a las dos ligas mayores de Norteamérica, según expectativas de mayor rentabilidad.
El mediopunta o “10”, de 22 años, aterrizó en su segunda patria, convencido que la presente estadía le arrastraría su catapulta definitiva como gran promesa del ataque, además de sus condiciones “mesiánicas” del juego a balón amarrado, en una explosiva simbiosis que no abunda en los lares de la región.
Heredia, quien recién ha dejado al Miedz Legnica del fútbol polaco por situaciones contractuales, no titubea en reconocer que la liga dominicana lleva un acelerado ritmo de crecimiento cualitativo, suficiente para estar “entre dos aguas” en su decisión inmediata, cuando se trata del factor conveniencia-realidad.
El jugador, de padres españoles, pero abuelo dominicano (hizo familia allí), combina su buen juego con plusvalía posicional, que lo convierte en pieza vital para cualquier plantilla.
Calidad a toda prueba El hispano-dominicano, es jugador zurdo con capacidad en cualquiera de las bandas de ataque o por el medio como mediocampista central, polivalencia ideal en una zona donde nacen las balaceras mortales.
Una de sus grandes virtudes son los balones parados al estilo Lionel Messi, como el disparo de “gol cantado” desde 30 metros ante Serbia y que milagrosamente pudo rechazar el guardameta.
“Mi mayor calidad de juego está como asistente en ataque, porque mi técnica es muy buena, con gran visión supliendo los balones”, aseveró Heredia, quien advierte la imperiosa necesidad de trabajar duro en el juego frontal, para conseguir mayor producción goleadora.
Heredia jugó como profesional en Inglaterra (2018-2019) en Segunda División del Wolverhampton Wanderers (Sub-23), de la Premier League, con la cual pudo interactuar en los entrenamientos tanto físicos como tácticos con la plantilla mayor, experiencia enriquecedora y fundamental para su desarrollo ulterior. Venía de mostrar sus talentos en la reputada Masía del FC Barcelona, misma que desarrolló a Messi y la generación dorada de loa azulgranas.
El exquisito volante agotó en liga B del club inglés 21 partidos, en los cuales anotó dos goles y repartió dos asistencias; mientras en torneo de copa perforó la red dos veces en cinco cotejos.
En Polonia hubo una situación que lo marginó a sólo nueve partidos, consiguió dos asistencias, el detonante que adelantó su salida tras haber pactado por cuatro años con el Miedz Legnica.
Entre dos mares Heredia, que se confiesa un enfermo de la comida dominicana, tiene su corazón y carrera “divididos” entre dos realidades que pueden ser muy disímiles, en una decisión profesional que no dejará de costarle muchas horas de sueño.
Es que el mediopunta nacido en Barcelona, pero que siempre visita a sus ancestros en el país, se mueve entre ofertas para volver al viejo continente y un regreso para debutar en el venidero campeonato de LDF. “Tengo una decisión difícil en las manos, la cual tendré en primer término que consultar con mi familia, porque en primer plano busco una oportunidad de juego consistente, para terminar de consolidarme”..
Empero, Heredia admite que República Dominicana le ofrece la posibilidad de una temporada que lo catapulte a una élite separada por el río Bravo, en esencia las ligas MX (México) y MLS (Estados Unidos), y acá tanto el clima como la comida, además del ambiente familiar, lo llevan de la mano con sus preferencias y reto de convertirse en la “cara” plenipotenciaria del fútbol doméstico.
Importancia de buenos fogueos Novedad La experiencia de jugar contra selecciones como Serbia (30), representa una gran oportunidad de República Dominicana (159) “meterse en el mapa”, tomando en cuenta la abismal diferencia de ambos en el ranking FIFA.