Aún disfrutando la doble coronación lograda en el pasado torneo y la Serie del Caribe, los Toros vienen por más este año y lo pondrán a prueba desde el mismo co­mienzo de la campaña.

De esta manera se percibe el panorama alrededor del equipo, entre su directiva y en plena ciudad, en que se busca hacer de los Toros de esta época en al menos una pequeña dinastía.

Esto así, tras el dominio absoluto que registraron en la pasada contienda, en la que se recuperaron de un inicio de 1-5 para concluir con 34-16 en la Regular, el mejor de su historia, que registraron dos rachas de triunfos de al menos doble dígitos, que contaron con un pitcheo abridor tan de­moledor que ganaron el 85 por ciento de los éxitos y cu­ya ofensiva no dio tregua a la oposición, será el que sal­drá al terreno en busca de convertirse en el primer do­ble campeón desde que el Escogido lo hizo en el 2011-12 y 2012-13.