Boxeo rosa
Yenebier ya no sueña con medalla olímpica, quiere faja del mundo
El impedimento circunstancial de llegar a los Juegos Olímpicos demolió su mundo amateur y arrancó hacia el otro rumbo, el ring pagado.
“Ahora tengo lo más apreciado que es mi hijo Jeiniel; tengo un récord profesional de 6-0, 6 nocauts, no tengo esa presión de que tiene que ganar medalla, tiene que ganarle a tal o a cual, aun cuando no estaban las condiciones físicas”, compara las épocas Yenebier y se siente mejor.
Jeiniel es el producto de la unión de Guillén y el prospecto peso medio Jeison “Banana” Rosario (19-1-1, 13KOs), quien hace carrera en los Estados Unidos.
“Ha sido una bendición de Dios, Jeison hace llamada video todos los días y chico Jeiniel lo reconoce y le balbucea ante la pantalla; solo Dios sabe por qué ocurren las cosas, de repente todo está fluyendo en nuestras vidas como debe de ser”, asegura la boxeadora zurda, campeona Panamericana y Centroamericana y del Caribe de los 75 kilogramos.
Tras dar a luz su hijo, el nombre de la pugilista dominicana más eficiente del campo olímpico no es una adivinanza ni objeto de discusión, Yenebier actuó en tres ciclos olímpicos con épicas hazañas y hasta hoy no tiene par.
Entre sus batallas más sonadas está la que libró contra sí misma, “castigando” su matrimonio y su intrínseco deseo de ser madre, hasta conseguir una medalla olímpica, que finalmente, nunca alcanzó.
“No me arrepiento de lo que hice, fue un pacto conmigo misma, quería darle esa medalla al país, me sacrifiqué, pero en dos intentos no tuve la ayuda que necesitaba: Viajé en la primera oportunidad a China y luego fui tras la clasificación a Kazajistán, dos días encima de un avión y al bajar, en cuestión de horas el pesaje, luego a dormir un poco y al día siguiente, ¡para encima del ring!, así fue la historia y en definitiva no pude clasificarme para los Juegos Olímpicos de 2012 ni para los del 2016. Ni Londres ni RíoÖ Ahora hay un nuevo camino, buscar una faja del mundo”, repasa en ‘santa paz’.
“No pelearon por mí” “Recuerda que hubo un problemita, yo llegué hasta los octavos de finales en las eliminatoriasÖ cerca de los Juegos el AIBA dijo que faltaba una boxeadora de los 75 kilos para Río y nadie peleó por mí.
“El AIBA me había premiado como la mejor boxeadora del continente, y estuve viajando en condiciones muy desfavorables; pero los dirigentes de mi país no abrieron la boca, no me valoraron y si ellos no lo hicieron ¿por qué un extranjero lo haría?.
“Como nadie dijo esta boca es mía entonces le dieron la oportunidad una peleadora de Panamá que era de otra división.
“Eso me dolió mucho porque ella prácticamente debutó en la división con ese chance, era de un peso inferior y la llevaron a los Juegos por encima de quien habían premiado como Boxeadora Femenina del Año por AIBA ¿qué más podía espera de mi federación? Ellos me derrotaron moralmente”, narra la púgil olímpico de mayores lauros conquistados para el país.
“Me pagaron mal” La medallista de oro de los Juegos Bolivarianos de 2013 y de los Centroamericanos y del Caribe de 2014 efectuados en Veracruz, México, se confiesa y habla por primera vez sobre sus disgustos finales dentro de la selección de boxeo.
“Había hablado claro en la federación de que me iba luego que participara en las olimpiadas, ya no tenía sentido volver a los mismos torneos que había repasado durante 10 años, todo sería igual.
“Agradezco, nunca odio, creo que me fui por la puerta grande, pero se dijo muchas cosas feas de mí solo porque me iba, me presionaron para que pagara mil dólares para darme el pase al profesionalismo, pero entonces ellos dejaron de pagarme cuatro meses de un dinero, que según ellos, daba el Creso; lo peor fue que antes de salir del seleccionado ya me estaban sacando del Parni para que también no me pagaran ni un día adicional.
“¡Fueron crueles conmigo y por eso es que a veces, cuando corro en el Centro Olímpico, ni cerca de ahí paso; no por los maestros ni por mis compañeros, ellos son para mí como de mi familia, pero la federación fue ácida conmigo, lo que nunca esperaba”, asevera la mejor boxeadora del continente Americano, en 2013, según AIBA, y “Atleta del Año” en el boxeo local en ambas ramas.
OPINION Tiene todo el talento dedicacion para triunfar CARLOS WILSON ALMONTE Entrenador de la selección nacional femenina “Yo trabajé muchos años con ella y es una persona que siempre tiene disposición para trabajar, no importa en las condiciones que se encuentre, siempre esa muchacha entrena fuerte y esa es una de sus mejores virtudes porque el que respeta su trabajo, en el caso de ellos es el boxeo, siempre saca buenos resultados.
“Uno sabe que los atletas no estarán para siempre con nosotros, ella cumplió su tiempo y sé que la veremos conseguir grandes logros como profesional también, por lo que dije anteriormente, por la seriedad que pone en el gimnasio, su disciplina de entrenar duro. Creo que si tiene problemas será en Europao África porque aquí fue la mejor del continente Americano”.