LUTO
Fallece Federico Velásquez a los 81 años de edad
Federico Velásquez, un legendario receptor que se rió hasta del dolor de la lesión que terminó cegándole la vida, falleció ayer al filo de la una de la tarde en Guanito, un distrito municipal de Sabana del Puerto, Villa Altagracia.
“De aquí solo me sacan muerto”, solía decir el ex jugador de los Leones del Escogido, cuya gorra no se quitaba ni para dormir. Los últimos cinco años de su carrera lo jugó con los Tigres del Licey.
Su parcela, la pesca y aguas frescas del río Duey , el canto de las aves y bonhomía de la gente le sedujeron de tal forma que a la Capital solo venía de vez en cuando a cobrar su salario como Inmortal del Deporte, en cuyo Pabellón fue exaltado en el año 1993.
Un largo carro negro de la Funeraria Blandino pasó por él a prima noche, pero no será hoy al mediodía cuando será expuesto en la Capilla La Paz.
La doctora María Sonsola Velásquez Castro, quien reside en Boston, Massachusetts, regresará hoy para despedirse de su abnegado padre.
El sepelio se hará el jueves al mediodía en el Cementario Nacional de la avenida Máximo Gómez.
Las otras hijas procreadas por Federico con su primera esposa María Castro Varón (f) son María La Paz y Marily Velásquez Castro.
Varios años después de retirarse del béisbol, él decidió mudarse para Guanito, en la antigua carretera Duarte, donde los pasó con la licenciada Milagros Mejía.
Ambos se dedicaron en cuerpo y alma a realizar labor social en el pueblo a través de una junta de vecino y de la Asociación Comunitaria Hermógenes Popa.
“La verdad es que no sé cómo voy a calmar este dolor tan grande, ni como podré vivir sin la compañía de Federico”, lamentó entre sollozos doña Milagros.
Jovial y profundamente humano, el ex jugador y compañero de los lanzadores Juan Marichal, los hermanos Felipe, Mateo y Jesús Alou en la primera época dorada de los Leones del Escogido, se dedicó a conseguir alimentos para los más pobres y hasta ayudaba a su consorte a inyectar personas en los operativos que realizaban.
De manos de su compadre Juan Marichal recibió en el 2018 una placa de reconocimiento durante el homenaje que le tributó la Fundación Rica en la apertura del Torneo de Béisbol de la RBI. en el estadio muncipal de Villa Altagracia.
Por una caída que tuvo hace dos años, se le fracturó una cadera y desde entonces su capacidad de movilidad fue muy limitada.
Pero eso no impidió que siguiera siendo el hombre jovial, alegre y cervecero de siempre.
“La directiva de los Leones extiende las condolencias a toda la familia Velázquez, deseando que Dios les cubra con su paz y les dé fortaleza, ante la pérdida irreparable de un extraordinario jugador y mejor ser humano”, señala el tradicional conjunto.
Lo propio hicieron los Tigres del Licey, la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana , la que con sus ejecuciones detrás del plato y gran poder con el madero, también ayudó a crecer.
El Comisionado Nacional de Béisbol, Ricky Noboa. también lamentó el deceso de este ícono del béisbol.
“Federico, elegante y carismático en su trato personal, defendió no solo detrás del plato la estirpe de aquellos jugadores del béisbol romántico, sino también la vergu¨enza con que se entregaban en la competencia que siempre exhibieron al jugar en los campeonatos nacionales”, declaró Noboa.