Putin jugó hockey, marcó goles, pero luego cayó al piso cuando no lo esperaba

El presidente ruso Vladimir Putin, salió al hielo el viernes en un juego de hockey en el que mostró sus habilidades para controlar el disco y anotó ocho goles, una presentación pública que refuerza su imagen de hombre de acción. Sin embargo, una alfombra le jugó una mala pasada y terminó en el piso.

Putin, cinturón negro de judo, busca usualmente mostrar su destreza atlética: ha entrenado con el primer ministro Dmitry Medvedev, ha esquiado en las pistas de Sochi y buceado en el Mar Negro.

Junto al ministro de Defensa Sergei Shoigu y grandes del hockey ruso como Pavel Bure e Igor Larionov, Putin contribuyó al triunfo de su equipo por un contundente 14-7 en la Liga de Hockey Nocturno.

Los compañeros ofrecieron a Putin, que jugó de centro delantero, muchas oportunidades de marcar y además encontró poca resistencia de la defensa rival.

Putin, cuya aprobación popular ha bajado en años recientes por los problemas económicos, periódicamente juega al hockey con funcionarios del gobierno, empresarios y exestrellas de la Liga Nacional de Hockey en partidos que se transmiten con pompa en la televisión nacional.

Putin, de 66 años, abrió el marcador a los 2 minutos con una jugada personal y luego anotó otros siete tantos para convertirse en el máximo anotador.

Al final, cuando daba la vuelta olímpica saludando a los presentes en el estado utilizado en los Juegos Olimpicos de Invierno 2014, se tropezó con una alfombra y terminó en el piso.