Medvedev, finalista en Barcelona en su debut en el torneo

El tenista ruso Daniil Medvedev, decimocuarto en el ránking ATP y debutante en el Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó, se clasificó para la final del torneo catalán después de deshacerse del japonés Kei Nishikori por 6-4, 3-6 y 7-5, en un duro partido que se alargó dos horas y 25 minutos.

Medvedev dijo en la previa que su ambición era ganar partidos y, sobre todo, torneos. Por eso salió a la pista dispuesto a maniatar a todo un número siete del mundo como Nishikori para meterse en la final del Godó. Su agresividad, siempre medida, contrastó en el inicio con el conservadurismo del nipón.

El ruso fue capaz de aprovechar la primera bola de rotura de la que dispuso, en el quinto juego del partido, y le bastó con mantener su servicio hasta el final del set para apuntarse el primer parcial del encuentro.

En toda la primera manga, Nishikori solo tuvo una oportunidad para recuperar su servicio, y fue justo cuando Medvedev sacaba para cerrar el set. Sin embargo, el número 14 del ránking ATP respondió con rotundidad: consiguió igualar el juego y, a continuación, cerró el set con dos saques directos.

El bicampeón del Godó (2014 y 2015) reflexionó en su banquillo y salió dispuesto a acelerar sus golpes en el segundo parcial. Y después de salvar un susto inicial -Medvedev desaprovechó una bola de rotura en el primer juego- el japonés empezó a dominar los intercambios.

Ese paso adelante reportó sus frutos a Nishikori, capaz de romper el servicio de su oponente para poner el 5-3 en el marcador. El tercer favorito del torneo no falló con su saque, e igualó el encuentro.

El último set fue una batalla de poder a poder, con alternancias y emoción constante. Primero golpeó Nishikori con una rotura, pero acto seguido fue Medvedev quien devolvió la jugada y se colocó con 3-2 a su favor.

Hubo más bolas de 'break' en medio de intercambios interminables, pero nadie volvió a acertar hasta que el ruso lo hiciera en el último suspiro.

El debutante restaba para sacar, con 6-5 en el marcador, y llevó al límite a Nishikori que, por una vez, sucumbió a la presión y cedió su último servicio, al estrellar en la red, con ventaja para el ruso, una derecha de las que no acostumbra a fallar.