“RIGHT AWAY”

En los Estados Unidos se utiliza mucho la frase “RIGHT AWAY” como respuesta a una orden o instrucción dada. Pedidos como “búscame un café”, “pásame el control”, “da diez vueltas al parque”, “dame 10 pechadas” reciben respuestas de esa naturaleza. Por lo general la persona que da esa respuesta tiene la intención de ejecutar lo solicitado de inmediato.

En nuestra cultura latinoamericana el ‘RIGHT AWAY’ no es muy efectivo. Por lo general somos postergadores, como caribeños tomamos la vida ligero, dejamos lo de hoy para mañana, y ‘fugamos’ cuando algo nos carga.

Esta actitud o mentalidad afecta el desempeño de cualquier profesional que busque ser tomado con seriedad. Las compañías o organizaciones que se rigen por un protocolo o procedimiento, no pueden esperar a un tercero que le parezca o no ejecutar en el momento. Todo aquel que busca productividad en una empleomanía espera prontitud en la misma y todo el que invierte dinero en un producto tiene interés en ver el fruto.

Los atletas que ya militan para una organización deben ser prontos en sus respuestas y reacción. Desde los más jovencitos hasta los más veteranos, un deportista siempre está siendo estudiado y observado y más si es un latinoamericano dentro del mercado anglo. Esas actitudes de ‘yo voy horita’ y ‘no me j... mucho’, le resta valor, lucidez y respeto a cualquier jugador o prospecto que pueda ocupar un puesto o ser considerado para tal. Siempre habrá otros que tendrán el talento y la actitud de avanzar y puede pesar el no corresponder con entrega y rapidez.

El “RIGHT AWAY” debe ser un ímpetu propio de todo aquel que quiere destacarse en un terreno o cancha de juego. Los coaches y entrenadores siempre están notando cualidades de carácter que denoten superación, obediencia, determinación y resiliencia. A ningún dirigente le gusta lidiar con jugadores que tengan una actitud desganada, medalaganaria, perezosa y holgazana. No importa que tanto talento bruto o potencial un jugador pueda tener si no tiene el “RIGHT AWAY” lleva las de perder.

El “RIGHT AWAY” se nota en un atleta que no vacila para asumir lo que toca. Es ese tipo de jugador que da la milla extra, que compite intensamente independientemente del nivel del contrincante, que da el máximo esfuerzo aunque no sienta hacerlo, que es puntual, responsable, flexible y razonable. Los jugadores “RIGHT AWAY” no interponen sus opiniones, formas de ser, preferencias ni inclinaciones ante los comandos de sus superiores. Ese tipo de jugador está claro que está bajo una línea de mando que tiene como propósito desarrollarlo a su máxima capacidad y para eso tendrá que ser sometido a regímenes que no le gustarán. El 2RIGHT AWAY” está para las que sea, como sea, donde sea y con quien sea.

Debemos reconocer que la postergación y en ocasiones la dejadez es parte de las debilidades que atañen a muchos jugadores nacionales. Es un comportamiento cultural y social muy propio de quienes somos, y es tan familiar y ambiental que no lo vemos como dañino o perjudicial. Sin embargo, no ejecutar cuando se debe, dejar para después acciones que requieren prioridad siempre desencadenará consecuencias incómodas de solucionar. Los deportistas siempre deben estar pilas, en guardia, en actitud militar, prestos a “josear” porque hay mucha competencia por una misma plaza o lugar.

´Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño? Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las manos para reposo; Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre armado.ª Proverbios 6:9-11. Aprendamos a pensar o decir ‘RIGHT AWAY’ y siempre se pensará en nosotros cuando se hable de desarrollo, avance, alzas salariales y promoción.