Jaime Alsina un liceísta de pie a cabeza

La hoja de servicio de Jaime Alsina dice que comenzó como fanático de los Tigres del Licey desde que tiene uso de razón. Luego mascota, vocal, tesorero y presidente desde el año 2017.

Se lo goza cuando los Tigres salen con la sonrisa de la victoria y sufre cuando el out 27 se lo hacen a su club.

“Nacimos aquí. Mi familia es fundadora del Licey”, destaca Alsina, de 66 años y profundas raíces en ese equipo.

“Seguimos esa tradición y entendemos que hemos aportado bastante al equipo”,

subraya en entrevista concedida en su oficina, a la que acudió ataviado con el “jacket” y gorras oficiales de los veces diez monarcas de la Serie del Caribe, por mucho el más ganador también.

Arraigo Su padre Manuel Alsina fue presidente del Club Atlético Licey en el período 1957-58, temporada en la que le tocó contemplar a los Leones del Escogido, su primer gran rival, levantar el trofeo de campeón.

Una experiencia similar le tocó vivir a Jaime en su primera campaña como el hombre fuerte del Licey

El 31 de enero de este año, en el séptimo juego de la serie final, las Águilas Cibaeñas, el más enconado rival de los felinos desde la década del 70, se impusieron once carreras por cinco y celebraron en casa ajena la obtención de la corona 21.

“Nosotros gozamos las victorias y sufrimos las derrotas”, declara el apacible presidente del más popular equipo de béisbol del área caribeña.

La familia Alsina ha estado relacionada a los 22 cetros conquistados por el conjunto añil en su rica historia, pero todavía no ha tenido la oportunidad de

alcanzarlo con uno de los suyos como principal directivo del mismo.

Objetivo único Durante su gestión no ha escatimado esfuerzo para lograrlo y por ello ha seguido la línea trazada por los que le antecedieron en el alto cargo en el sentido de erogar los recursos que sean necesarios para obtener el preciado título.

“En este equipo, todos los años, siempre se gasta todo lo que entra. Su prioridad es Operaciones de Béisbol”, manifiesta el presidente número 18 en la centenaria historia del equipo azul, blanco y ahora negro también.

“¿Cuál es el presupuesto”?, se pregunta y él mismo contesta: “Depende de las entradas, pero creemos que anda por los 80 millones de pesos..”.

Aclara que que probablemente será ese el monto que nuevamente se destinarán al departamento que se encarga de discutir contratos con los jugadores nativos, contratar al dirigente, a los extranjeros, evaluar durante meses los que estarán disponibles en el Sorteo de Novatos, ficharlos, hacer un tour por los campos de entrenamientos para darles seguimientos, sugerir qué hacer y cómo jugar a partir de la sabermetría, entre muchas cosas más.

“El presupuesto del Licey será menor de lo que se invirtió en el metro”, apunta en son de broma Miguel Guerra, ex presidente del Licey en el período 2013-2015.

“La comercialización va muy bien. A estas alturas del juego vamos mejor que el año pasado”, señala sobre el importante área que dirige Juan Pumarol a través de la compañía “Brand Master”.

“Es muy fácil vender a un equipo cuando llega a la final”, afirma Miguel Ángel Fernández, a quien Alsina reemplazó como presidente “azul”.

“Licey es el Licey”, proclama Tancreo Aybar Torres, vicepresidente del combinado capitino.

Pero la mejoría no ha sido solo en ventas de publicidad, sino que también se registra una mayor demanda en el área de boletería.

“Llevamos dos millones de pesos más en las ventas de los abonos”, informa Alsina con evidente satisfacción. “Es el resurgir del béisbol”.

DIRECTIVA DEL LICEY -Jaime Alsina (Presidente)

-Tancredo Aybar (Vicepresidente)

-Federico González (Tesorero)

-Domingo Pichardo (Secretario).

-Miguel Guerra (Director)

-Miguel Ángel Fernández (Director)

-Ricardo Ravelo (Director)

-Rafael Úbeda (Director)