CONFERENCIA OESTE
Durant acerca a Warriors a la barrida
Golden State pone serie 3-0 a su favor ante los Spurs
El alero Kevin Durant reivindicó su condición de líder de los Warriors de Golden State al aportar 26 puntos, nueve rebotes y seis asistencias que ayudaron a su equipo a conseguir la victoria a domicilio por 110-97 ante los Spurs de San Antonio en el tercer partido de la eliminatoria de primera ronda de playoffs de la Conferencia Oeste.
Un partido que estuvo marcado por el dolor y el luto de toda la familia de la NBA y en especial de los Spurs tras el fallecimiento la madrugada del miércoles de Erin Popovich, la mujer del entrenador del equipo de San Antonio, Gregg Popovic, que no estuvo en el banquillo y su puesto fue ocupado por el italiano Ettore Messina.
El exentrenador del Real Madrid dirigió su primer partido de playoffs en la NBA.
Un día después de fallecimiento de Erin, 40 años de matrimonio con Gregg Popovich, que al final no pudo superar la lucha contra una enfermedad, que no ha sido dada a conocer, la disputa del partido quedó en un segundo plano.
No solo por la ausencia de Popovich sino porque dentro del equipo, aunque se trató de darle normalidad a toda la actividad, sin mostrar antes del partido ningún vídeo de tributo a Erin, ni guardar un minuto de silencio, al final las emociones y pensamientos pudieron con el intento de ser profesionales.
Faltaba el Popovich incisivo, incansable, moviéndose por la línea del campo para dar instrucciones a sus jugadores y también exigir rigor a los árbitros.
Su puesto lo ocupo un Messina, profesional, con gran compostura que intentó como todos superar la prueba de la mejor forma posible, y al final el resultado era algo que de alguna manera se esperaba.
Jugadores como los veteranos, el base francés Tony Parker, y el escolta argentino Manu Ginóbili, que guardan una relación especial de amistad con Popovich y su familia, admitieron que salir a disputar el partido era lo más difícil, porque su único deseo era estar al lado del entrenador que desde que llegaron a San Antonio, junto a su esposa Erin, les dieron todo el apoyo, cariño y ayuda.
De ahí, que el resultado, de alguna manera, quedase en un segundo plano, aunque para los Warriors, actuales campeones de liga, era lo que deseaban conseguir.
La victoria de los Warriors les permitió ponerse con ventaja de 3-0 y a sólo una más de conseguir la barrida de la serie que disputan al mejor de siete.
Algo que podrán conseguir si el sábado, cuando se dispute el cuarto partido, en el mismo escenario del AT&T Center de San Antonio logran también el triunfo.
Junto a Durant, otros cinco jugadores de los Warriors tuvieron números de dos dígitos, incluido el escolta Klay Thompson, que llegó a los 19 tantos después de anotar 19 puntos con 3 de 6 triples.
Mientras que los bases reservas Shaun Livingston y Quinn Cook anotaron 16 y 12 tantos, respectivamente, siendo también factor ganador.
El ala-pívot Draymond Green y el escolta Andre Iguodala, de titulares, también llegaron a los 10 puntos cada uno, y se combinaron para repartir 11 asistencias, y 10 rebotes.
El partido se rompió a favor de los Warriors en la recta final de la primera mitad cuando los actuales campeones de liga consiguieron una racha de 20-9 que les permitió superar la desventaja que tenían de cinco tantos y se fueron al descanso con el liderato provisional de 46-52.
El ala-pívot LaMarcus Aldridge logró un doble-doble de 18 puntos, 10 rebotes y cuatro asistencias que lo dejaron como el líder de los Spurs.
Mientras que Parker, que había definido a Erin y a Gregg como unos padres, llegó a San Antonio con 19 años, a pesar de lo difícil del momento, hizo su mejor partido en lo que va de los playoffs al conseguir 16 puntos en los 17 minutos que estuvo en el campo, nada que ver con el promedio de dos tantos que tenía hasta ahora en los dos primeros partidos de la serie.
El alero Rudy Gay, que siguió como titular, llegó a los 11 puntos y capturó seis rebotes.
Por su parte, el pívot español Pau Gasol, que jugó 18 minutos como reserva cumplió con una aportación de seis puntos tras encestar 3 de 5 tiros de campo, falló los dos intentos que hizo desde la línea de personal y no fue a la línea de personal.
El jugador de Sant Boi también capturó siete rebotes, que fueron todos defensivos, puso un tapón, perdió dos balones y le señalaron tres faltas personales.
Mientras que Ginóbili fue el que más se sintió afectado en su juego por lo emotivo del partido y acabó sin anotación en los 17 minutos que jugó tras fallar los cinco tiros que hizo a canasta, incluidos cuatro intentos de triple.
Ginóbili recuperó dos balones, perdió otro, puso un tapón y cometió tres faltas personales.