PRIMER ROUND
Por fin, Elio
Hace falta que ocurra algo de valor en el boxeo doméstico para que las graderías se alegren un poco, así que esa posible presentación del campeón en receso Elio Rojas caerá muy bien a los fanáticos y a él también, luego de más de un año fuera de los cuadriláteros. Elio posee un talento innegable, puede mantener por un buen rato la corona del mundo del peso pluma, tuvo que ir a Japón a buscar esa faja, luego la defendió en México, pero cuando venía lo mejor, la unificación, tuvo que operarse de su mano derecha y ha sufrido una gran decepción tras un largo período de recuperación. GRAN PRUEBA: Luego de tanta espera, por fin vuelve al entarimado nuestro único campeón de hoy día, pero el CMB le ha ordenado una pelea para el 17 de septiembre ante el rey “interino” Johnny González, de México. Por ello, la pelea de preparación es una necesidad para Elio, una necesidad urgente. En términos locales cae muy bien presentar a un monarca en estos momentos, ya que se están realizando una que otras veladas para favorecer a algunos peleadores en ascenso y también para hacerle récords a un sin número de púgiles boricuas que tienen el país de finca experimental de chatas y vienen a cosechar, ¡al chapeo!, como hace las Grandes Ligas con el “beisbolito” local; claro, sin comparar jamás la estructura de la pelota con el silvestre ring profesional local. FUERA DE TÍTULO: Si Elio logra esa pelea de preparación en tierra dominicana se uniría a un pequeño grupo que ha actuado aquí en ese rol: Pascual Pérez (1958), Sugar Ray Robinson (1963), Israel Contreras (1989), Rafael Torres (1992), Josué Camacho (1993) y Joan Guzmán (2003). La mayoría de los manejadores de nuestros campeones mundiales han sido tan mediocres que no son capaces de honrar al público que vio subir a estos muchachos desde el campo aficionado, quieren que el gobierno le pague 20 pasajes aéreo para traer todo el “tigueraje” de Nueva York, que le pague un hotel cinco estrellas para toda la familia, más un cheque millonario, para que el pueblo los vea. CONQUISTAS Y DEFENSAS: En cuando a los que se han coronado aquí hay que mencionar al pionero Carlos –Teo- Cruz, su victoria de 1968 en el estadio Quisqueya ante el campeón boricua Carlos Ortiz, hizo una pelea de preparación en Japón y sus dos defensas en Los Ángeles. Juan Guzmán ganó el cetro minimosca en 1976, en el Palacio de los Deportes, frente al panameño Jaime “Cieguito” Ríos, pero lo entregó de inmediato en Japón; y Rafael Torres, en el hotel Jaragua en 1989 ganó la vacante mínima ante Yamil Caraballo. Los campeones dominicanos que han tenido el privilegio de defender sus coronas en el país, solo han sido dos: Leonardo Leo Cruz, monarca supergallo AMB, emuló a su hermano Teo en 1983 al vencer a Cleo García en el estadio Quisqueya; mientras que Joan Guzmán, mantuvo su corona 130 ante el gringo Antonio Davis, en el 2006.