Vicente Scarpatte

El miércoles 17 del presente mes, falleció en Boston, Massachussets (USA), el que fuere receptor, inicialista y manager en la pelota profesional. Tiraba y bateaba a la derecha. Nació en Santiago el 8 de agosto de 1927, es decir, que nos abandonó a la edad de 83. Su primera experiencia beisbolera fue con el equipo “Felicidad”, cuando tenía 13 años. Se dio a conocer como un destacado catcher, participando en los combinados amateurs, “Municipal”, “Cogñac Jorge, “Crema Imperial”, “Santiago” y otros más. Formó parte de la “Selección Nacional” en la Serie Mundial Amateur de 1944, la VII, celebrada en Caracas y defendió los colores patrios en los V Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1946. Dio el salto al profesionalismo en 1947, marchando a Colombia para jugar con el team los Tejedores del “Filtta”, donde se convirtió en líder empujador, bateando cinco homers. Vicente, siendo activo dentro del béisbol, medía 5’ 11’’ y pesaba 176 libras. Militó en Puerto Rico con los Senadores del “San Juan” en dos temporadas, 1949-50 y 1950-51, en las cuales bateó para un promedio de 278. En nuestra pelota, Vicente jugó con el “Escogido” en 1951 y 1952, luego pasó a las filas de las “Aguilas Cibaeñas”, donde se mantuvo hasta la campaña de 1960-61. Su mejor año profesional fue el 1951, cuando en 164 turnos al bate, conectó 50 hits para un average de 305, impulsando 25 carreras. Después de su retiro, el cibaeño se convirtió en coach y manager. En el momento de su deceso, sufría de diabetes y tenía complicaciones renales. Sentimos mucho la partida del santiaguense, al cual nos unía una amistad de años. La semana pasada nos llamó desde la ciudad de Santiago, la ex jugadora de volibol, Felícita Peralta Zouain, la cual es conocida por el seudónimo de “Fela”. Ella nos informó que la otrora volibolista Grace Moya había fallecido en el Centro Geriátrico “Dra. Moreu”, que está situado en la calle De los Acosta, Canabacoa. Grace fue una atleta que en sus años buenos, realizaba su juego en dos vertientes, era colocadora, a pesar de su tamaño alto y también fungía de kileadora. Entre sus actuaciones se le recuerda cuando era integrante del combinado “Deportivo Santiago”, donde se distinguió en los triunfos ocurridos en la década de los años 50. Además ella, como jugadora de primera categoría, participó en los VII Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1954, celebrados en México, y en los II Panamericanos de 1955, efectuados también en el país azteca. Nosotros, que éramos amigos de Grace, ya anteriormente la habíamos visitado en el recinto donde estaba recluida. Que pena nos da esta noticia, pues ella fue de las buenas de su tiempo. Descanse en paz, Grace Moya, siempre te tendremos presente.