economía
Las finanzas de los nativos digitales
Tanto los “millennials” y “centennials” tienen en común el haberse desarrollado en el auge de internet. Y, a la hora de trabajar, esto se refleja en sus prioridades y en cómo afrontan las dificultades en época de crisis.
Nativos digitales. Seguro que ya han leído mucho el término que alude a las generaciones Y y Z, también conocidos como “millennials” y “centennials”, nacidos entre 1980 y 2010 (años arriba o abajo según quien haga la clasificación). Puede que sean ustedes parte de ellos.
En cualquier caso, estas generaciones, que tienen en común el haber nacido o crecido durante la era digital y el auge del internet, llevan unos años ocupando titulares y siendo fruto de teorías por parte de generaciones anteriores.
Pero ahora, con datos, pueden saber realmente cómo trabajan y gestionan su economía los nativos digitales.
VIVIR AL DÍA
Más de la mitad de “millennials” y “centennials” tienen algo en común: suelen vivir al día, de sueldo en sueldo, sin muchas previsiones de ahorrar y gastando lo que van obteniendo. Según la “Encuesta 2023 de Gen Z y Millennials” de Deloitte, esto es así en el 52 % de la generación Y, y en el 51% de la generación Z.
Eso sí, un tercio de los encuestados están contentos con el equilibrio que han logrado entre trabajo y vida personal. Aun así, hasta el 37% de “millennials” y el 46% de “centennials” han complementado su trabajo principal con algún otro empleo para poder llegar a fin de mes.
Además, a la mayoría de los nativos digitales les gusta la flexibilidad, y muchos han optado por el teletrabajo o por un modelo híbrido que combine presencialidad algunos días con otros de jornadas en remoto.
Pero preferir trabajos parciales o a distancia, no significa que estas generaciones no tengan ambiciones empresariales. Por ejemplo, según un informe de Workforce Institute, el 57% de “centennials” tienen aspiraciones laborales y la expectativa de ascender cada año.
Además, un 14% de ellos ha emprendido algún negocio y al 58% les gustaría hacerlo, de acuerdo con datos de la consultora Indeed. Y, además de emprendedores, son ahorradores: según el informe de Klarna “Gestión de finanzas en la nueva era”, el 50% tiene algún fondo por si hay emergencias o imprevistos.
Sin embargo, tanto a la generación Y como a la Z, les preocupa mucho la situación futura. Según el informe de Deloitte, el 55% de los primeros y el 56% de los segundos creen que cada vez será más difícil pedir un aumento de sueldo. Y el 50 % y 49% lo ven igual de complicado para un ascenso.
A su vez, el 51% de “millennials” y el 52% de “centennials” creen que será complicado encontrar nuevos empleos. Y eso que el trabajo es lo que más le importa al 62% y al 49% respectivamente.
ECONOMÍA DIGITAL
En cuanto a la forma de gestionar su economía, aunque tanto “millennials” como “centennials” muestran una gran confianza en los sistemas digitales a la hora de administrarse, cada generación tiene sus particularidades.
Por ejemplo, los jóvenes de la generación Y les preocupa mucho más el coste de la vida que a los de la generación Z: un 42% respecto a un 35%, según Deloitte. Paradójicamente, su propia situación económica personal le importa más a los “centennials” (un 44%) que a los “millennials” (un 35%).
Eso sí, la influencia en el estado de ánimo de ambos que tiene la situación económica general es similar: un 27% de los Y junto a un 30% de los Z piensan en ello. Lo mismo ocurre con las finanzas tanto personales como familiares: el 43% y 40% respectivamente sienten una responsabilidad prioritaria hacia ello.
Además, ambas generaciones de nativos digitales sienten que tienen un amigo por el cuál terminan gastando más dinero, de acuerdo con un estudio de Credit Karma realizado por Qualtric.
Por ejemplo, el 30% de ellos teme sentirse excluido por amistades con mayor poder adquisitivo si no pueden seguir su ritmo de vida, lo que los lleva a gastar más de lo que realmente pueden permitirse.
Además, ambas generaciones sufren de FOMO (“Fear of Missing Out”), el miedo a perderse experiencias, algo que, junto a las “tentaciones” de las redes sociales, influye en sus hábitos de gastos.
En cualquier caso, lo que está claro es que la presencia de estas generaciones será cada vez más mayoritaria en el mundo empresarial, y además ya se están convirtiendo en los principales consumidores, por lo que la economía, más temprano que tarde, estará en sus manos.