En últimos dos años el Ministerio de Deportes ha recaudado más de 43 millones de pesos con galleras

Los datos que se encuentran en el resumen de ingresos, publicado en la página del Ministerio de Deportes, especifican que en el 2022 las galleras suministraron en RD$21,622,760.05, mientras que en 2023, RD$22,222,050.00.

Las peleas de gallos es un deporte

ARCHIVO. Las peleas de gallos es un deporte

La República Dominicana posee 1,448 galleras legales a nivel nacional que dejan como beneficio al Ministerio de Deportes y Recreación más de 20 millones de pesos al año.

A través de esta práctica, que es considerada legal y un deporte desde el 2009 en el país, esa institución facturó en los últimos dos años RD$43, 844, 810 en ingresos por pagos de las galleras.

Los datos que se encuentran en el resumen de ingresos, publicado en la página del Ministerio de Deportes, especifican que en el 2022 las galleras suministraron en RD$21,622,760.05, mientras que en 2023, RD$22,222,050.00.

El documento señala que de todos los ingresos que recibió esa institución, las galleras representaron el 52% en 2022 y en el 89% 2023.

El Ministerio de Deportes explicó a Listín Diario que las galleras que operan en el país son divididas por categorías y de acuerdo al nivel que se les asigna, deben pagar anualmente. Las de categorías clase A, pagan al año RD$100,000; clase B, RD$60,000 y clase C, 30,000.

Para tener una gallera, según informó esa entidad, las personas necesitan tener un terreno con título de propiedad o un acto de venta legalizado por la Procuraduría General de la República; “la compra de cheque de administración de RD$10,000.00 (levantamiento, no reembolsable)”.

Además de un papel de “no delincuencia de la policía”; una carta de no objeción del ayuntamiento; una carta de junta de vecinos. La misma no puede estar cerca de una escuela o iglesia; la persona necesita un permiso del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, sobre ruido; “balanza dentro y fuera de la gallera.

También un reloj visible en el redondel; baños tanto para hombres como mujeres; sillas obligatorias en la primera y segunda fila; redondel acolchado y alfombrado; un juez de valla “identificación y laboratorista certificado con licencia al día”; cafetería; parqueo “amplio y confortable”; equipo, amplificador de sonido; cocina y comedor; planta eléctrica e inversor y un cepo.