historia
Falta de equilibrio entre ingreso y gasto es un mal que nos afecta desde el inicio de la República
En 1856, Pedro Francisco Bonó señaló, como uno de los males que afectaban a la economía dominicana, la "falta de equilibrio en sus rentas y las erogaciones", falta que dijo "obliga al gobierno a emitir papel moneda que roe la riqueza pública".
Según el historiador Franklin Franco, Bonó ante esta situación proponía que no se pusiera en circulación más de lo que se percibe y que se fuera amortizando paulatinamente el papel moneda. Además, propuso la creación de un Banco Nacional, lo que podría ser hoy el Banco Central.
Planteó la necesidad de este Banco Nacional, cuya garantía sería la renta del Gobierno, los valores de caja, y las propiedades nacionales, para poder restablecer la confianza en las obligaciones del gobierno.
Además de ese desequilibrio, otro de los grandes males de esa época, según el historiador, era el desorden administrativo, la conducta dolosa de una buena parte de los funcionarios que tenían a su cargo las recaudaciones del Estado y la indolencia exhibida por los altos funcionarios cuando se ponía en evidencia cualquier malversación de los fondos públicos.
Bonó fue el primer dominicano que enfocó el problema financiero del Estado dominicano con la audeza de un economista, según Franklin Franco.
El período de la Primera República (1844-1861), adolecía de dirigentes políticos con profundo conocimiento de la economía, explica Franco, solo Pedro Francisco Bonó y Benigno Filomeno de Rojas lograban tener ese conocimiento, pero ninguno ocupó una posición decisiva o influyente, aunque expresaban sus opiniones en el Congreso y en reuniones ministeriales, nunca fueron tomadas en cuenta.