¿Pueden desaparecer las sucursales de los bancos y transformarse en digitales?
Diversos estudios, nacionales e internacionales, han relevado que la pandemia del nuevo coronavirus agilizó la digitalización de los bancos y todo parece indicar que esta tendencia se mantendrá.
Investigaciones recientes realizadas en el sector financiero en América Latina y aquí en República Dominicana indican que durante el período más rígido de confinamiento las entidades fortalecieron sus sistemas digitales y que un significativo número de usuarios adoptó métodos virtuales para efectuar sus operaciones.
Esto indiscutiblemente traerá cambios permanentes en la banca. Así lo evidencian los resultados los resultados de un reporte publicado en agosto de este 2021 por la Unidad de Inteligencia de The Economist y la empresa especializada en software empresarial para bancos y servicios financieros Temenos.
El informe indica que el 58% de los ejecutivos bancarios de América Latina cree que el modelo tradicional basado en sucursales se volverá obsoleto en 5 años y que a nivel mundial el porcentaje se eleva al 65%.
El documento establece que a medida que los cierres de sucursales por la pandemia Covid-19 aceleran los cambios de los consumidores en la banca en línea, los banqueros creen que el modelo basado en sucursales morirá.
Para el estudio, realizado entre febrero y marzo de 2021, fueron entrevistados 305 ejecutivos financieros sobre temas relacionados con la digitalización de los bancos de Europa, América del Norte, Asia Pacífico, África y Oriente Medio y América Latina.
Mercado local
En el ámbito local, un informe publicado recientemente por la Superintendencia de Bancos (SB) indica que durante la pandemia un gran número de entidades de intermediación financiera (EIF) reportó un aumento en el uso de sus canales alternos, principalmente de las aplicaciones móviles, el teleservicio y la banca en línea.
Igualmente, un 15% de los que no usaban las aplicaciones móviles adoptó este canal debido a la crisis sanitaria.
“Las nuevas transacciones digitales que los usuarios adoptaron a partir de la pandemia, en mayor participación, fueron los pagos, con un 33% de adopción (13% pagos de facturas y servicios, 10% pagos en la misma entidad y 10% a otras entidades); mientras un 29% de los usuarios indicó no haber tenido cambios en las transacciones que realizan a través de los canales digitales”, detalla el documento.