Sugieren Congreso investigue uso de la tecnología Pegasus contra ciudadanos
Para Peter Bäckman, CEO de una empresa de ciberseguridad, la infraestructura cibernética de República Dominicana debe ser solidificada de manera que pueda hacer frente a los retos que presenta un panorama cibernético que evoluciona más rápido de lo que se puede regular y responder.
Paralelo a esto, el especialista en ciberseguridad ha destacado que la regulación respecto a los procesos de reporte de incidentes cibernéticos a las infraestructuras críticas y protocolos de respuesta y acciones preventivas debe ser continuamente revisada y actualizada.
El socio fundador de TEDCAP, al enviar un comunicado a este medio, asegura que la ciberseguridad es un tema de seguridad nacional, que directamente afecta la capacidad de proveer un entorno comercial seguro para las empresas, las comunidades corporativas y para la inversión extranjera.
“Las fronteras digitales deben ser protegidas con el mismo celo que las físicas. Nuestra soberanía sobre nuestro ciberespacio debe estar en el centro de la agenda de las instituciones públicas y el Congreso”, recomienda.
Agrega que es crucial que el gobierno actual, el congreso dominicano y las dependencias de inteligencia investiguen el alcance del uso ilegal de la tecnología Pegasus para ciberespionaje a ciudadanos privados, miembros de la prensa y de la oposición.
El pasado 19 de julio, Amnistía Internacional junto a otras 17 organizaciones mediáticas de todo el mundo, revelaron que la tecnología Pegasus de ciberespionaje está siendo usada por gobiernos para espiar a ciudadanos, atacar y silenciar a la oposición, y en algunos casos, para asesinatos políticos.
Al respecto, Bäckman recuerda que a través de una filtración de información de la empresa Israeli llamada NSO, fueron revelados más de 50,000 números telefónicos que pertenecían a periodistas, mandatarios presentes y pasados, miembros de la oposición y ciudadanos privados que estaban en una lista de posibles atacados por la tecnología Pegasus, comercializada por esta empresa de ciberespionaje.
“Esta tecnología tiene la capacidad de infiltrarse en un celular, sin autorización y sin dejar casi rastro y extraer todos sus mensajes, correos, fotos; además de poder convertirlo en un dispositivo de espionaje, al poder activar la cámara y micrófono de manera remota”, lamenta el experto.
Bäckman manifiesta que además de tener transparencia y traer a la justicia a los que usaron la tecnología para usos ilegales y se beneficiaron, estas revelaciones deben poner al país en alerta sobre los riesgos cibernéticos a los que están expuestos los ciudadanos y las infraestructuras críticas nacionales.
“Estas revelaciones han producido una crisis cultural y política alrededor del mundo, ya que ha revelado la extensión en que gobiernos, presentes y pasados, han abusado de la privacidad de sus ciudadanos”, sustenta el especialista.
En la investigación denominada Proyecto Pegasus participan más de 80 periodistas del mundo de 17 medios y organizaciones, entre las que se encuentra The Guardian, The Washington Post, Le Monde, Radio France, The Wire, The Organized Crime and Corruption Reporting Project, Haaretz, PBS Frontline, Aristegui Noticias, Proceso entre otras.