Trabajo infantil afecta a 160 millones de niños y niñas en todo el mundo
Progresos mundiales en la lucha contra este flagelo se han estancado desde el 2016
El trabajo infantil sigue siendo un problema persistente en el mundo. Las últimas estimaciones mundiales indican que 160 millones de niños (63 millones de niñas y 97 millones de niños) se encontraban en situación de trabajo infantil a nivel mundial a principios de 2020, lo que representa casi 1 de cada 10 niños en todo el mundo.
Según las estadísticas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), un total de 79 millones de niños, casi la mitad de todos los niños en situación de trabajo infantil, realizaban trabajos peligrosos que ponían directamente en peligro su salud, seguridad y desarrollo moral.
Explica la OIT que los progresos mundiales en la lucha contra el trabajo infantil se han estancado desde el año 2016. El porcentaje de niños y niñas en situación de trabajo infantil no ha cambiado en estos últimos cuatro años, mientras que el número absoluto de niños en situación de trabajo infantil ha aumentado en más de 8 millones.
Destaca que el porcentaje de niños y niñas que realizan trabajos peligrosos prácticamente no ha cambiado, pero ha aumentado en 6.5 millones en términos absolutos. El panorama mundial enmascara los progresos continuos en la lucha contra el trabajo infantil en las regiones de Asia y el Pacífico, y en América Latina y el Caribe.
En 2020, según la OIT, hubo 16.8 millones más de niños de 5 a 11 años de edad en situación de trabajo infantil que en 2016. La crisis de la COVID-19 amenaza con seguir erosionando los avances mundiales en la lucha contra el trabajo infantil a menos que se adopten medidas urgentes de mitigación.
Los nuevos análisis indican que otros 8,9 millones de niños estarán en situación de trabajo infantil a finales de 2022 como consecuencia de la creciente pobreza impulsada por la pandemia, sostiene la OIT y apunta que el impacto real dependerá de las respuestas de política.
La OIT manifiesta que dos escenarios adicionales demuestran la enorme influencia de la cobertura de protección social en el trabajo infantil a corto plazo. En los casos en que se permite que se pase por alto la cobertura de protección social, el trabajo infantil podría aumentar mucho más de aquí a finales de 2022.