Automatización con inteligencia
Es probable que la interrupción de COVID-19 deje un efecto duradero en la forma en que se realiza el trabajo.
La difusión de los robots en el lugar de trabajo ha sido una conclusión inevitable desde hace algunos años, a pesar de una historia de inquietud por parte de los humanos. Ahora, una tormenta perfecta de circunstancias parece estar, finalmente, colocando la automatización inteligente (RPA ) en un lugar permanente en las operaciones comerciales del día a día. Según una reciente encuesta global de Deloitte, el 73% de los encuestados dijo que sus organizaciones se han embarcado en un camino hacia la automatización inteligente: un salto significativo del 58% en 2019.
Parece que los robots, aunque todavía soportan la carga de estigmas humanos profundamente arraigados, han entrado en la corriente principal. El desafío ya no es cómo aceptaremos la automatización inteligente en el lugar de trabajo, sino cómo podemos aplicarla sabiamente y para obtener el mayor beneficio.
Es probable que la interrupción de COVID-19 deje un efecto duradero en la forma en que se realiza el trabajo, y esto se extiende a la automatización. Teniendo en cuenta el trabajo remoto generalizado y la configuración requerida para proteger los lugares de trabajo, el aumento de la automatización entre la fuerza laboral es casi un hecho. Aunque la mayoría de los encuestados nos dijeron que COVID-19 ha provocado que sus organizaciones reconsideren cómo se hace el trabajo, las ruedas del progreso ya estaban girando; el 78% está implementando la automatización robótica de procesos y el 16% planea hacerlo en los próximos tres años.
Para que las organizaciones integren con éxito la RPA, primero deben reconocer que la transformación es necesaria. Comienza, haciendo una elección consciente sobre lo que quieren lograr. Esta decisión luego se incorpora a una estrategia de RPA robusta y realista. Ese es el ideal, pero aquí está la realidad: sólo el 26% que están probando automatizaciones, y el 38% de los que implementan, tienen una estrategia de RPA en toda la empresa.
Entre las barreras para el éxito: los encuestados clasificaron la fragmentación del proceso y la falta de preparación de TI en la parte superior de la lista. La resistencia al cambio ocupó el tercer lugar, seguida de cerca por la falta de una visión clara.
Inevitablemente, hay trabajo por hacer para los que buscan una transformación que ofrezca una automatización inteligente de E2E. Romper los silos funcionales y de procesos es imprescindible, al igual que aumentar los procesos comerciales mediante la combinación de herramientas y tecnologías.
En general, la encuesta mostró que se han logrado grandes avances para llegar a este nuevo mundo de automatización inteligente. Pero la carrera hacia nuestro futuro robótico no está del todo ganada, porque la adopción no garantiza un valor añadido. Aquellos que ven los mayores beneficios de la automatización se habrán involucrado en transformaciones en toda la entidad, arraigadas en estrategias centradas en el ser humano y con visión de futuro.