Economia & Negocios

Política Monetaria

¿Qué implicaciones tendrá en República Dominicana la baja de la tasa de interés de la Reserva Federal de EE.UU.?

Cándida AcostaSanto Domingo, RD

La significativa reducción de la tasa de interés dispuesta por la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) impactará la economía dominicana. Consultados al respecto, el doctor, Antonio Ciriaco Cruz, vicedecano de Economía de la UASD; y los economistas Eduardo Tejera, Rafael Espinal y Luis Vargas hablaron del tema. Tejera cree que el Banco Central de República Dominicana debe reducir su tasa de política monetaria a un 4% anual.

A juicio de Cruz, la Reserva Federal de Estados Unidos redujo sus tipos de interés en 100 puntos básicos, llevándolo a una horquilla entre 0%-0.25%. Además, la inyección de US$700 millones en compras de activos en bonos del tesoro e hipotecas, por parte de la FED, lo hace con la intención de dinamizar la economía norteamericana e incidir en la expectativas de los agentes y empresas que cotizan en los mercados de capitales”.

Para República Dominicana esta medida por parte de la FED de EEUU tendrá varios efectos, en opinión de Cruz, citando en primer lugar que las exportaciones dominicanas de bienes y servicios podrán moderar el choque negativo de la desaceleración del ritmo de crecimiento de la economía de EE.UU. debido a que esta economía tendrá más liquidez. Aduce que esto mejorará el desempeño de la actividad empresarial en EE.UU. manteniendo su alto nivel de empleo y esto redundará a favor de los dominicanos empleados y favorecerán la tendencia actual de las remesas proveniente de ese mercado.

En segundo lugar, señala que el oro se mantendrá como activo refugio, hasta que estas medidas surtan sus efectos y reduzcan el nerviosismo de los mercados, lo cual seguirá beneficiando al país, ya que el precio del oro seguirá en la vecindad de los US$1,650 la onza, y esto beneficia a República Dominicana.

Como tercer beneficio, el costo de emisión del nuevo endeudamiento para República Dominicana será mucho más bajo, generando una mayor tentación al aumento del endeudamiento actual.

El economista Eduardo Tejera la define como una fuerte medida de estímulo monetario que baja a 0% y 0.25% la tasa monetaria y autorizó a la FED a comprar US$700 billones en bonos del Tesoro para darle liquidez al sistema.

Dentro de los problemas que RD tendrá por la caída del turismo y los efectos sobre empleo y divisas, la rebaja de tasas de interés nos beneficia, es positivo para reducir el costo de la nueva deuda pública y los préstamos del sector privado, incluyendo a la banca dominicana, afirma.

Los tres efectos positivos de la crisis son el alza del precio de la onza de oro, la caída a US$31 el barril de petróleo y ahora la reducción de intereses de la FED. “Lo negativo para nosotros es el golpe al turismo y la hotelería”, precisó.

Para el economista, el Banco Central dominicano debería reducir la tasa monetaria a 4.0 %, para estimular la economía y apoyar al sector privado.

En tanto que Luis Vargas afirma que “el paquetazo” de medidas monetarias de la FED y otros cinco bancos centrales no resuelve la actual crisis mundial. Estamos hundiéndonos en una crisis peor que la de 2007-2008, agrega.

Cree que ese paquetazo es inefectivo, porque al inyectar más liquidez a la economía inflama la especulación financiera, sin reactivar la producción, la inversión y el empleo y solo se logra repuntar el precio del dólar, los precios de los títulos del Tesoro (con caída de los tipos de interés) y que las corporaciones compren sus propias acciones

“Las rebajas del macro-paquetazo internacional de las tasas de interés no resuelven el problema, por motivo de que estamos delante de un choque de oferta (poda de la producción, empleabilidad”.

Rafael Espinal, del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) opina que esta medida es una respuesta desesperada ante la caída de la economía mundial.

“Esa decisión muestra la profundidad de la crisis que se avecina. Solo la aviación perderá 113 mil millones de dólares, las proyecciones en Europa ya son de crecimiento negativo en próximo trimestre, la caída del petróleo y las bolsas mundiales serían de largo plazo y la ruptura de las cadenas globales de producción paralizaría la industria mundial a corto plazo. Un verdadero desastre aun mayor que el propio COVID-19”.