¿Cómo mejorar el clima laboral 4.0?

Entre 1924 y 1933, en una planta de la empresa Western Electric Company, algunos investigadores buscaron comprobar el incremento de la productividad de los trabajadores, aumentando o disminuyendo la iluminación ambiental.

En esa época, situada en la segunda revolución industrial, la preocupación en las plantas operativas se centraba en el ausentismo y medir la iluminación o ventilación les permitía disminuirla y con ella alcanzar sus índices de producción.

Con la Cuarta Revolución Industrial, existe una gestión controlada y optimizada de factores básicos “higiénicos” como la iluminación- por ejemplo, las luces inteligentes-, pero en temas de infraestructura y diseño existen otros retos: espacios colaborativos, facilidades para la virtualidad, condiciones de accesibilidad e incluso espacios para lactancia que apoyen las políticas de diversidad e inclusión.

De la misma forma, muchos factores de clima organizacional han mutado y medirlos bajo los elementos del pasado, sólo generará inversiones sin resultado.

En parte, por las nuevas condiciones y ecosistema digital, en parte por las expectativas y necesidades de la fuerza laboral, el Clima 4.0 es uno más exigente y estratégico, que tiene su núcleo en las personas, en la necesidad de potenciar sus habilidades e impulsar su crecimiento. Existe un entendimiento nítido de la correlación entre el clima centrado en el colaborador y el logro de una dinámica ágil e innovadora.