Proyectan una nueva caída de la carga tributaria en Centroamérica
La carga tributaria en Centroamérica mantiene una trayectoria descendente este 2019 y de continuar la tendencia cerrará en el 13,7 % del producto interno bruto (PIB), su segunda caída anual consecutiva, alertó el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi).
Este comportamiento puede atribuirse a crisis políticas, pérdida de legitimidad de los Gobiernos, menor crecimiento económico de los países y al menoscabo de la eficiencia en la recaudación, de acuerdo con el estudio, que analiza la situación fiscal del primer semestre de 2019 y hace una proyección de cierre del ciclo.
De acuerdo con los cálculos, "algunos de los Estados de la región terminarán con agujeros fiscales de entre 31,2 millones de dólares (Nicaragua) y 431,1 millones (Panamá), mientras que en términos del PIB, podría equivaler a entre 0,3 % (El Salvador y Nicaragua) y 0,6 % del PIB (Panamá)", indicó el Icefi.
El estudio del Icefi calcula que en 2019 la carga tributaria de Costa Rica cerrará en 12,8 %; El Salvador en el 17,6 %; Guatemala 9,7 % ; Nicaragua en el 15,1 % y Panamá en el 8,4 %, con una bajada respecto al resultado de 2018, cuando fue del 13,2 %; 18 %; 10,1 %; 15,6 % y 9 %, respectivamente.
La única excepción es Honduras, donde subiría al 18,6 % (fue del 18,1 % en 2018), derivado "principalmente del aumento de los precios (variación de 4,8 % a junio), y de la depreciación del tipo de cambio nominal (2,3 % de variación a junio)".
Sobre la caída en la carga tributaria, el director del Icefi, el guatemalteco Jonathan Menkos, dijo a Efe que los "escasos" estudios de evasión que existen en la región "no señalan específicamente qué sectores económicos registran los niveles más altos de evasión fiscal", uno de los factores que empuja el descenso del indicador.
Pero independientemente de ello, añadió, "la evasión fiscal en toda Centroamérica es resultado de fenómenos como el contrabando de mercancías, especialmente de las procedentes de México y de China por medio de simulación de operaciones en Panamá".
También por "el alto nivel de informalidad regional, que es resultado tanto de la pobreza creciente como de la falta de capacidad de las estructuras económicas de crear empleos bien remunerados".
Además por "la prevalencia de tratamientos tributarios que producen flujos ilícitos de capitales; el abuso de los precios de transferencia internacional; y la notoria falta de voluntad de los gobiernos y Congresos para enviar señales inequívocas sobre el riesgo de castigo ante el no pago de impuestos", dijo Menkos.
En su análisis, el Icefi señaló como "efectos inmediatos observables" de la caída de la carga tributaria la disminución del gasto y la inversión pública en El Salvador, Guatemala, y Nicaragua, y una mayor velocidad de endeudamiento público en Panamá y El Salvador.
A juicio del ente regional, "merece especial atención Costa Rica, que, salvo un cambio de trayectoria, derivado de los resultados de la reforma tributaria aprobada, podría tener más recursos de lo previsto en el presupuesto, aunque podría reflejar una menor carga tributaria que la histórica, por lo que podría producirse un aumento del déficit y de la deuda pública".
En este escenario de caída de los ingresos tributarios, dijo el Icefi, es "importante recordar que para los países del Triángulo Norte Centroamericano (El Salvador, Guatemala y Honduras) la recaudación constituye como mínimo el 90 % de los recursos con los que cuentan para ejecutar sus políticas públicas".
Así, en un contexto "actual marcado por la necesidad de ofrecer una respuesta contundente e integral a la migración forzada por la pobreza, la carencia de oportunidades y la violencia, estos Estados carecen de recursos propios y de uso inmediato para ampliar la cobertura y calidad de los bienes y servicios públicos".
"A esto se suma una alta desconfianza ciudadana en los gobiernos de Guatemala y Honduras. Merecen especial atención, Costa Rica y Nicaragua, que aprobaron reformas tributarias recientes y cuyos resultados, en términos de mejora de la recaudación, están todavía en entredicho", añadió el Instituto.
Por todo lo anterior, el Icefi instó autoridades fiscales y tributarias, y las legislativas a "que diseñen y pongan en marcha planes integrales para la mejora de la fiscalización y el combate al contrabando y la informalidad" en la región.
También a que se refuercen los esfuerzos en la lucha contra la corrupción, a favor de la transparencia y de la rendición de cuentas, "a fin de que logren elevar la recaudación tributaria, que es un elemento vital para garantizar el poder infraestructural de cualquier Estado democrático".