Anuncian entradas de plantas por apagones, pero esto no evitará por completo el desabastecimiento

Se requerirán unos 2,500 millones de pesos mensuales, para enfrentar la actual crisis eléctrica en el país.

Así lo informó César Prieto, superintendente de Electricidad, quien afirmó que esos costos no serán traspasados a los consumidores.

De su lado Rubén Bichara, vicepresidente ejecutivo del a Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), anunció la entrada de las generadoras San Felipe, Haina TG y San Lorenzo que aportarán en conjunto 305 megavatios para paliar los apagones, al tiempo que las distribuidoras podrán compensar el impacto causado por la salida de AES Andrés y de los 46 megavatios de Barahona Carbón.

Sin embargo, Bichara explicó que la entrada de estas plantas generadoras no compensa por completo la salida de otras unidades programadas para octubre, por lo que “podríamos tener una desabastecimiento de al menos 500 Mw y la compensación que podemos hacer es de poco más de 300 Mw por lo que el déficit se reduce pero no termina”.

Como medida se hará una reprogramación de los mantenimientos y de los circuitos para disminuir el impacto, indicó Bichara.

Asimismo dijo que la Compañía Eléctrica San Pedro de Macorís reprogramó su calendario de mantenimiento para que sus 300 megavatios salgan del sistema en tres unidades y no al mismo tiempo como tenían previsto, lo cual reduce el déficit a 100 megavatios durante el último trimestre del 2018.

De igual forma, en octubre estarían fuera 155 megavatios de Los Mina V, los 469 megavatios de Barahona Carbón y 200 de los 300 megavatios de AES Andrés, esta ultima si logra incorporar 100 megavatios a finales de septiembre.

Bichara enfatizó que es posible que el subsidio supere los US$770 millones, aunque recordó programado en el Presupuesto Nacional era de US$425 millones, debido al impacto de los aumentos de precios del petróleo que suman unos US$200 millones más, además de los 49 millones que significa la salida de AES Andrés, la incorporación de unidades de generación de alto costo “mas otros sacrificios económicos como el que implica mantener sin variación la tarifa eléctrica para no afectar a la población”.