PRIMER EMPLEO
Las pasantías en las empresas: El trampolín para el primer empleo
Las expresiones de los estudiantes universitarios de Periodismo que reciben cada año la oportunidad de pertenecer al programa Periodista por un Año de la Editora Listín Diario son indescriptibles.
El día de la bienvenida la alegría les irradia por los poros y el de la despedida sus lágrimas expresan el agradecimiento infinito que casi no logran traducir en palabras.
La mayoría de los que han participado en este programa, alrededor 200 hasta la fecha, consideran que la experiencia fue un trampolín para insertarse al mercado laboral en su área.
Y así ha sido, pues tras concluir la pasantía, período en el cual realizan todas las labores y son tratados como todos los periodistas profesionales de la redacción, la mayor parte se inserta rápidamente en los medios de comunicación o, como ha sido el caso de muchos, se quedan trabajando en la empresa.
“Después de esa pasantía no he estado desempleada y (apenas) tengo casi 24 años. Creo que sin esa oportunidad habría sido difícil insertarme en el mercado laboral”, afirma Daniela Pujols.
Pujols considera que todas las empresas del país deberían tener programas de pasantías, remuneradas y por un tiempo determinado, porque si a la gente no se le da esa primera oportunidad, nunca podrá demostrar de lo que es capaz.
En una investigación realizada por Pujols y Odalis Manuel Minyeti se determinó que el 72.0% de los participantes en el programa obtuvo trabajo en otro lugar al terminar la pasantía.
Sacrificio
Es por esto que muchos jóvenes han tenido la gallardía de dejar empleos estables con tal de incursionar en su área como pasantes, como fue el caso de Ana Mañón.
“Yo llevaba tres años trabajando como servicio al cliente en una empresa y estaba hastiada. Me decía constantemente: debo trabajar en mi área, así que cuando llegó la oportunidad la aproveché y al ser seleccionada en el programa renuncié a mi trabajo. Y no me arrepiento”, afirma con convicción tras cinco años de haber tomado esta decisión.
Jhenery Ramírez es otra joven que considera que sin la experiencia obtenida durante la pasantía habría sido muy difícil conseguir empleo en el área que le gusta y por lo que tanto se fajó.
“Tengo amigos de la universidad que se graduaron con honores y no han podido conseguir trabajo en el área. Si no hubiese sido por esa oportunidad yo estuviese en esa situación. Ahora tengo dos trabajos y ambos los conseguí por relaciones construidas durante esa primera experiencia”, expresa con firmeza.
El relato de estas cuatro jóvenes es sólo una pequeña muestra del impacto positivo que tienen los programas de pasantías que se desarrollan en empresas de comunicación; del sector financiero, como la Asociación Popular de Ahorros y Préstamos (APAP); o industrias como Nestlé, que también acogen a pasantes.
Aunque es imposible recoger todas las historias, es indudable que estas iniciativas marcan de manera muy particular a los beneficiados, quienes siempre agradecen a aquellos que creyeron en ellos y les dieron esa primera oportunidad.
¿Qué dicen los empleadores?
En un estudio realizado en el país por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se reseña que los empleadores consideran que es importante recibir pasantes para ayudar a los jóvenes a integrarse en la sociedad y en el mercado laboral, con lo cual entienden pueden contribuir a evitar que estén en la calle y que entren en problemas, como la delincuencia.
También reconocen que les son de mucha ayuda.
Otros ven a los pasantes como una oportunidad porque pueden reducir sus costos laborales o como mano de obra barata, según indica el estudio.
Es por esto que expertos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) han advertido que es necesario implementar buenas prácticas para que las pasantías no se conviertan en un abuso.
AUTOESTIMA.
Quienes realizan una pasantía tienen mayor confianza en lo que pueden ofrecer al mercado de trabajo porque pueden identificar y desarrollar mejor sus habilidades.
Esto puede contribuir a la reducción del desempleo, indica el estudio del BID
ADVERTENCIA.
La OIT advierte en uno de sus informes que las políticas que promuevan la primera experiencia laboral no deben perjudicar derechos y señala que la calidad del empleo es fundamental.
Respecto al país, el organismo reseña que entre las dificultades que enfrentan los jóvenes para insertarse en el mercado laboral se encuentran la falta de experiencia y de oportunidades de empleos, entre otras.
COMPROMISO.
Unos 17 empleadores que desarrollaban programas de pasantías en sus empresas consultados para un estudio del BID publicado en el 2011 valoraron la actitud positiva, disposición a aprender, la rapidez con la que aprenden, el sentido de responsabilidad y de colaboración con las tareas de la empresa de la mayoría de sus pasantes.
Muchos de ellos dijeron que hacían esto sobre todo para ayudar a la inserción social de los jóvenes y no para cubrir vacantes en sus compañías.
EXPERIENCIA CON LOS PASANTES
La directora de Recursos Humanos de Nestlé, Gisselle Brito, expresó que en la empresa han tenido buenas experiencias con los pasantes, que regularmente han tenido jóvenes con muy buena actitud y muchos deseos de superación.
Indicó que en su programa de pasantías “Empléate” han participado alrededor de 200 jóvenes. La ejecutiva manifestó que el interés de Nestlé es que otras compañías del país repliquen ésta y otras de sus iniciativas que buscan reducir el desempleo juvenil.