“Una oportunidad para seguir creciendo”

El nicho de mercado está ahí, ese 15% de personas que vive con una discapacidad y que tiene intenciones de viajar son potenciales visitantes para que el sector turístico de República Dominicana siga creciendo, sobre todo en un segmento que no se le ha prestado la debida atención, tal y como afirman los dirigentes de esa área.

La pregunta sería ¿están dadas las condiciones para aprovechar esta oportunidad? Según el vicepresidente de Hoteles de Santo Domingo, Luis Padilla, la mayoría de los hoteles están aptos para recibir turistas con alguna condición especial, no obstante, no hay en el país un sistema integrado que permita la movilidad de estas personas sin tener obstáculos.

Para que un hotel sea considerado como un complejo inclusivo, varios son los factores que se deben tomar en cuenta. De acuerdo con la encargada de inserción laboral de la Asociación Dominicana de Rehabilitación (ADR), Guadalupe Moll, la principal condición que debe poseer el lugar es el de Accesibilidad Universal.

Según Moll este aspecto incluye estacionamientos especiales, habitaciones, baños y un recorrido de rampas y/o ascensores, que llegarán a los lugares estratégicos donde se realicen las actividades comunes (áreas de comedor, piscinas, acceso a la playa, bares, restaurantes, discoteca, gimnasio, etc.

“La accesibilidad universal beneficiará a todos los viajeros, convirtiéndose en un factor clave de la calidad de los componentes del sector turístico”, considera.

Manifiesta que aunque diversos hoteles cumplen con las normas de accesibilidad universal, la mayoría se limita a tener rampas de acceso en las entradas principales.

Asegura que muchos de estos no cumplen los requisitos de las habitaciones y mucho menos con baños adecuados.

“En la mayoría de los centros hoteleros las personas con discapacidad físico motoras se convierten en espectadores de la playa, ya que no tienen acceso a las mismas. Para llegar a las playas se convierten en dependientes de otros, que en ocasiones, a “puro riesgo” lo acercan a las áreas”, puntualiza.

PUNTOS CLAVES A TOMAR EN CUENTA PARA GARANTIZAR UNA ESTADÍA PLENA Y SATISFACTORIA A ESTOS TURISTAS SON LOS SIGUIENTES, SEGÚN LA OMT:

1 LA INFORMACIÓN ES LA CLAVE:

Es imprescindible aportar datos fiables y actualizados sobre el estado de accesibilidad en el destino.

2 CADENA SIN RUPTURAS:

Los destinos deben crear una oferta consistente de ‘Turismo para Todos’, que incluya todos los elementos de la cadena de valor (sistemas de reservas, alojamiento, transporte, etc.) y un fácil acceso a ellos.

3 EL DESAFÍO DEL TRANSPORTE:

Es necesario que existan medios de transporte adecuados para llegar al destino y desplazarse por él. Un destino que no los ofrezca hará que el turista decida no emprender el viaje.

4 SEGURIDAD DE USO:

Al hacer un recurso accesible, se deben tener en cuenta las condiciones de seguridad para todos los visitantes y medidas de protección de posibles deterioros.

5 INCLUSIÓN:

Es preciso ofrecer los servicios adecuados de una manera integrada dentro de la oferta del destino. Las propuestas segregadas no funcionan si no se justifican con una mayor calidad.

6 LA ACTITUD LO ES TODO:

Es clave proporcionar la formación específica al personal para atender a las personas con necesidades de acceso, ya que de este modo se favorece la atención individualizada.

70% VIAJAR

Según la Unión Europea el 70% de las personas con condiciones especiales quiere viajar, pero destinos como República Dominicana no les permite acceder al turismo inclusivo.

INICIATIVAS

Para hacer de República Dominicana un destino turístico inclusivo se deben implementar varias iniciativas que permitan la libre movilidad de personas con condiciones especiales desde su llegada al aeropuerto hasta su estadía en un hotel.

Luis Padilla considera que hacer del país un lugar accesible no depende del Ministerio de Turismo (Mitur), sino que debe existir una sinergia entre los ayuntamientos, el Gobierno Central y el sector empresarial.

Dentro de las recomendaciones que hace se destaca la colocación de semáforos inteligentes para peatones y pasos de cebra frente a cada hotel que se encuentra en el Malecón de Santo Domingo.

Esto permitiría que los visitantes puedan pasar desde el hotel hacia el litoral del malecón con libre movilidad.

Asimismo, indica que hasta el momento solo existen rampas para sillas de rueda.

Los cambios que requiere el país para lograr el turismo inclusivo conllevan dinero. La Organización Mundial del Turismo (OMT) establece que más que un gasto es una inversión, ya que si se plantea desde el inicio del diseño o haciendo pequeños cambios, se consiguen mejoras significativas que pueden producir un aumento de cuota de mercado.

Además, mejora la competitividad y favorece la fidelización de los clientes. “Los destinos que no cumplan con la accesibilidad corren el riesgo de encontrarse al margen del mercado actual”, indica el organismo internacional.