Tejada pide que el agro esté incluido en el censo

El censo de población y vivienda que se realizará el país en octubre de este año debería llevar un apéndice agropecuario por la importancia e impacto que tiene este sector económico para los dominicanos y en la generación de divisas en República Dominicana. Así lo sugirió el economista Frank Tejada, experto en temas agropecuarios, quien consideró que el país debe enterarse de cuál debería ser la tenencia de la tierra en el 2010, porque en el censo de 1998 únicamente el 45% de las fincas tenían certificados de títulos. Afirmó que este documento es básico para obtener un crédito bancario hipotecario. Indicó que de esa forma se podrá verificar las áreas en la reforma agraria, ya que el Instituto Agrario Dominicano (IAD) dice ha distribuido 10.3 millones de tareas. Sin embargo, explicó que en el censo de 1998 solamente esa entidad apareció con 3.8 millones de tareas. “Cuando los técnicos del censo fueron a verificar los datos, funcionarios de ese instituto que les confesaron, ya que era norma de ese organismo aumentar las cifras por razones políticas. Eso me lo dijeron técnicos que elaboraron el censo en 1998”, reveló Tejada. Indicó que en 1998 el 95% de las fincas de arroz tenían menos de 100 tareas y que después que los gobiernos abandonaron el Consejo Estatal del Azúcar (CEA), la caña de azúcar, de principal cultivo dominicano, pasó a segundo y tercer lugar. Destacó que ahora en el 2010 el gobierno de Estados Unidos aumentó la cuota azucarera, la cual casi en su totalidad es cubierta por el Central Romana. Recordó que el censo de 1960 arrojó que habían tres millones de tareas sembradas de caña de azúcar, en 1998 bajó a 2.8 millones y en el 2010 no se conocen las áreas sembradas de caña de azúcar porque el CEA sólo tiene en producción el ingenio de Barahona. Señaló que los centrales Esperanza y Catarey fueron traspasados por Joaquín Balaguer a la Reforma Agraria y parte de las tierras de Catarey las tienen empresas privadas, así como también programas especializados del gobierno como es el proyecto ganadero del CEA. “Se dice que cuando los ingenios azucareros pasaron al gobierno en 1961 tenían alrededor de cuatro millones de tareas. Alguien debería decir quién tiene las tierras del CEA y qué se hicieron las instalaciones industriales y los rieles de los ferrocarriles”, dijo Tejada. Además, entiende que el país debería aprovechar las tierras que eran de los ingenios Haina, Boca Chica y Ozama, para sembrar piñas de exportación, ya que el país tiene un gran potencial en este y otros productos.