Golpe moratal para el turismo en Cabarete

PUERTO PLATA.- En los años 50 Cabarete era una estrecha franja de terreno entre un humedal con dos lagunas (Cabarete y Goleta) y el mar, por donde pasaba una carretera construida por la empresa italiana Del Conte y Allasia. La playa de Cabarete estaba protegida por dunas que se extendían desde Punta Goleta hasta la desembocadura del río Joba, pasando por la Boca de Orí.

A los dominicanos no les gustaba esa playa, la consideraban mala por desolada y porque hacía mucho viento.

Preferían la cercana y hermosa playa de Sosúa.

En el año 1968, dos ciudadanos del sur de California, el velerista Jim Drake y el surfer en tablas Hoyle Shweitzer, crearon lo que hoy se conoce como windsurfer (tablavaela), una vela montada sobre una tabla de surfear por medio de una junta universal.

Para los años 70, las tablavelas fueron producidas de manera masiva para cubrir la demanda mundial que ese nuevo deporte había concitado.

En Europa se desató una fiebre por este deporte unipersonal, en Alemania existen más de 3 millones de tablavelas y en Francia no menos de 7 millones. Por los registros de ventas se ha establecido que uno de cada tres hogares de Europa tiene un windsurfer.

Este deporte tuvo un crecimiento sin precedentes en los años 80, período en que se celebró el primer Campeonato Mundial de Windsurfing.

En la costa norte En el periodo 1981-82, el franco-canadiense Jean Laporte llegó a Cabarete porque había sido informado de la incidencia de vientos en su playa promediaban más de 12 nudos por hora y soplaban en una misma dirección general.

Laporte predicó sobre el potencial del windsurfing para desarrollar Cabarete como un polo turístico de primer orden. Luego, otro franco-canadiense, Claude Marois, fundó la primera escuela de este deporte acuático en Cabarete.

Así llegó el desarrollo de Cabarete. Esta comunidad pasó de un desconocido villorrio de pescadores a una de las capitales mundiales de la tablavela. Cabarete está entre los 10 primeros lugares de reconocimiento mundial para la práctica del windsurfing y es el único lugar del país que reúne esas condiciones.

Escuela internacional Hubo un momento que en Cabarete habían 11 escuelas internacionales de tablavela para satisfacer la demanda de turistas de todas partes que eran atraídos por sus condiciones óptimas para la práctica de ese deporte.

¿Pero que ha pasado en los últimos ocho años? ¿Por qué ha estado disminuyendo la afluencia de turistas a Cabarete? ¿Por qué ahora sólo quedan cinco escuelas de windsurfing? Lo que ha sucedido, de acuerdo al registro diario de los vientos en Cabarete por los últimos 15 años realizados por los propietarios de dos escuelas de windsurfing, es que los vientos están disminuyendo su efecto de velocidad en relación directa con el levantamiento de construcciones hoteleras y de otra índole en el arco de playa que va desde Punta Goleta a Punta Cabarete.

Cabarete ha estado haciendo eventos internacionales de windsurfing y kitesurfing desde el 1986. Para el 2009 están programados los torneos Caribbean Midwinter Laser Regatta, cuyos resultados contarán para clasificación en la International Sailing Federation; el Master of the Ocean, un evento único para Cabarete, en el cual los participantes compiten en las disciplinas Surf, Windsurf y Kitesurf. El deportista con la mayor puntuación “overall” se clasificará como Master of the Ocean.

El Campeonato Mundial de Kiteboarding, del cual Cabarete ha estado siendo anfitriona desde el 2001, y el Clásico Pablito Guzmán, de Windsurfing, un evento de prueba de habilidad, organizado en Cabarete por el campeón dominicano Pablito Guzmán.

Reglas urbanística El decreto 406-00 del 11 de diciembre de 2000 sobre el Ordenamiento Territorial de las Zonas Turísticas de Puerto Plata, establece que en Cabarete no se pueden levantar estructuras de más de 11.50 metros de altura (tres pisos). Cuando se comenzó a bloquear el viento con las construcciones de edificios de tres pisos a lo largo del arco de costa, se fue creando una turbulencia por rebote de los vientos que en el año 1993, cuando se inició el registro, tenían una incidencia de 69% de días al año con vientos de más de 12 nudos por hora, el mínimo necesario para la práctica de windsurfing. Para el 2007, el porcentaje anual de días con vientos adecuados había disminuido a 20% y las grandes velocidades se han perdido.

Por esa razón ahora se tienen que emplear velas más grandes. Si con el levantamiento de construcciones de tres pisos en la zona de incidencia los vientos han disminuido en forma alarmante su constancia y velocidad, con construcciones de cuatro o más pisos como desean algunas personas en pleno laborantismo para conseguirlo, se le estaría dando el golpe mortal a Cabarete como destino turístico especializado. Se privaría al país de un sitial mundial de mucha valía, sacándolo del mapa internacional del deporte de vela en nombre de una inversión mal orientada en perjuicio de ese importante polo turístico.

MUCHOS HOTELES HAN CERRADO EN CABARETE PLAN DE DESARROLLO En Cabarete han cerrado sus puertas grandes hoteles con 300 habitaciones o más como Camino del Sol, Punta Goleta, Paraíso del Sol, Club Azzuro, Tropical Garden, entre otros. La ocupación hotelera, en tiempos de temporada alta ronda el 50%, lo que unido al cierre de los hoteles se resume en la pérdida de cientos de puestos de trabajo. Estos son ejemplos de lo que ha estado aconteciendo en Cabarete por falta de un plan maestro de desarrollo que debe contemplar el factor viento como núcleo alrededor del cual se planificaría su crecimiento.

Es recomendable que no se permitan construcciones de más de tres plantas, en ambos lados de la carretera, desde el sector de La Rinconada hasta la playa El Encuentro, como la única manera de preservar a Cabarete como una de las capitales mundiales del windsurfing. Aunque el país necesita de grandes inversiones en divisas fuertes, por la situación económica mundial, no es justo que se vendan lugares únicos como Bahía de las Águilas, Parque Nacional del Este y Cabarete.

Eso no es progresar, eso sería retroceder.