Rajoy ve avalada su política por el G20

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, consideró ayer que el G20 avala las políticas que se están aplicando en España y estuvo satisfecho con los resultados de la cumbre de Hamburgo pese a las discrepancias con Estados Unidos, que cree que podrían reducirse en el futuro.

Rajoy hizo un balance positivo de esta cumbre en la conferencia de prensa que ofreció a su término y en la que dijo que los líderes del G20 han constatado que las políticas económicas que hay que impulsar son aquellas en las que España lleva ya trabajando años.

Es decir: el impulso de reformas estructurales, la estabilidad macroeconómica, el empleo o la digitalización, según explicó Rajoy.

De la misma forma, consideró que se recogen en las conclusiones de la cumbre asuntos prioritarios para España como la defensa de un sistema de comercio abierto y fundamentado en normas, el rechazo del proteccionismo, la cooperación en materia fiscal, un trabajo de cooperación con los países de origen de la inmigración ilegal y un reforzamiento de la lucha contra el terrorismo.

En el ámbito económico, aprovechó para destacar la situación actual de España frente a la que vivía el país cuando participó en 2012 en su primera reunión del G20, en Los Cabos (México).

Rajoy destacó el consenso existente en Hamburgo en torno al libre comercio, con las precisiones que hubo que introducir para facilitar el apoyo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y llegó a mostrarse incluso "razonablemente satisfecho" con el resultado del debate sobre el cambio climático.

En este punto no fue posible la unanimidad debido a que la administración estadounidense ya había anunciado su desvinculación del Acuerdo de París.

Pero el presidente del Gobierno español resaltó que el comunicado final recoja el mantenimiento del compromiso colectivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Precisó que se ha tomado nota de la retirada de Estados Unidos del Acuerdo de París, pero que el resto de los líderes del G20 reafirmó su compromiso con el mismo y lo consideró "irreversible".

Por tanto, a su juicio, no puede hablarse de resultados decepcionantes de la reunión y, de hecho, aseguró que de las seis cumbres del G20 a las que ha asistido, ésta fue una de las más positivas.

Incluso el hecho de que se hayan plasmado las diferencias con Estados Unidos cree puede servir para iniciar el camino del consenso futuro.

"Ya veremos", emplazó Rajoy, quien dijo que "el mundo no se acaba" por el rechazo de Trump al Acuerdo de París.

El presidente del Gobierno no cree tampoco que pueda decirse que Trump estuvo aislado en la cumbre porque le pareció "muy activo" y porque la mayoría de decisiones se adoptaron por unanimidad.

Rajoy explicó igualmente las líneas generales de su intervención en el debate sobre inmigración, del que fue ponente a petición de la presidencia alemana del G20.

Pidió combatir las causas profundas de la inmigración mediante la cooperación al desarrollo con los países de origen y tránsito, luchar contra el tráfico de personas, garantizar un retorno "seguro, rápido y humanitario" de quienes no pueden permanecer en los países a los que han llegado, e integrar a los inmigrantes que es posible acoger.

A su juicio, en esta política, que precisó que es la que lleva aplicando España desde hace tiempo, "no hay atajos ni soluciones sencillas" y será necesario "un esfuerzo de largo aliento y de reforzamiento de los recursos".

Destacó también que se comprobara en la cumbre el consenso existente en torno a la lucha contra el terrorismo y el hecho de que, a iniciativa de España, se incluya el reconocimiento de las víctimas como un principio esencial en esa lucha.

Además, consideró que este hecho tiene especial relevancia para España en un momento en el que se cumplen veinte años de la liberación del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, que había sido secuestrado por ETA, y del asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco.