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INTEC utiliza Inteligencia Artificial para predecir comportamiento del dengue

Un equipo interdisciplinario del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) también desarrolló un modelo predictivo y de gestión de riesgo de la pandemia del Covid-19 en República Dominicana.

El Aedes aeyipti, mosquito transmisor del dengue, se cría en aguas limpias.

El Aedes aeyipti, mosquito transmisor del dengue, se cría en aguas limpias.ARCHIVO/LD

Investigadores del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) desarrollaron una herramienta mediante el uso de la Inteligencia Artificial (IA) para modelar la dinámica del dengue, con la finalidad de mejorar la respuesta del Ministerio de Salud Pública.

La investigación se realizó como parte de un proyecto del Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondocyt) del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCYT), ganado en la convocatoria 2018-2019.

El proceso tomó 24 meses e involucró a un equipo de expertos en diversas disciplinas, incluyendo epidemiología, bio-matemática, estadística y matemática computacional, expresa un comunicado de prensa.

Este equipo estuvo conformado por Adelaide Freitas, Helena Sofía Rodríguez, Natália Martins, Adela Lutis, Michael A. Robert, Demian Herrera y Manuel Colomé. Además de los estudiantes de INTEC, Albert González Then y Pedro Vega, asistentes de investigación.

Estas investigaciones resultan beneficiosas, ya que, según Manuel Colomé, profesor de Epidemiología y Medicina Preventiva del Área de Ciencias de la Salud del INTEC, al anticipar la ocurrencia de brotes e identificar áreas de riesgo, se pueden tomar “medidas preventivas y de control de manera oportuna”, lo que contribuye a reducir la incidencia de la enfermedad y a la mejora de la salud pública.

El proceso inició a partir de la problemática sanitaria que significó el dengue en el 2019, con aproximadamente 20,000 casos en aquel año, la mayor cifra histórica de la región hasta ese entonces, luego desplazada por los 23,000 contagios del 2023.

Entre los principales hallazgos de esta investigación, está la confirmación de que los efectos de las condiciones meteorológicas, como la temperatura y la precipitación, tienen una implicación directa en los brotes de dengue que se evidencian en un periodo de 2 a 5 semanas.

“El cambio climático puede influir en los brotes de dengue al afectar las condiciones ambientales que favorecen la reproducción y propagación del mosquito vector”, dijo Colomé, investigador principal.

Citó que los aumentos en la temperatura y en las precipitaciones pueden ampliar el rango geográfico del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, y acelerar su ciclo de vida, lo que a su vez puede aumentar la incidencia de la enfermedad.

Además, se identificó la provincia de Barahona como la de mayor incidencia de dengue durante el período de estudio 2015-2019.

También se analizó la tasa de incidencia semanal de la enfermedad, proporcionando información valiosa para la predicción y control de futuros brotes, entre otras observaciones que mejoraron los modelos predictivos de transmisión en el país.

Colomé explicó que utilizaron técnicas avanzadas de aprendizaje automático, logrando que el modelo pudiera analizar grandes cantidades de datos epidemiológicos y climáticos para identificar patrones y relaciones complejas.

Covid-19

Mientras, a raíz de la emergencia sanitaria provocada por la pandemia del Covid-19, el INTEC como parte de su compromiso social, continuó esta línea de investigación bajo el liderazgo de los profesores Renato González, Eladio Pérez y Manuel Colomé.

Indicó que esos educadores, junto al Laboratorio de Innovación e Inteligencia Territorial del Banco Interamericano de Desarrollo (BID-LAB) construyeron un modelo predictivo y de gestión de riesgo de la pandemia del Covid-19 en República Dominicana, el cual fue entregado a las autoridades de Salud Pública, como parte del aporte del INTEC a la salud y el bienestar de la nación.

“La inteligencia artificial es una herramienta poderosa que tiene el potencial de mejorar significativamente nuestra capacidad para abordar problemas complejos en diversos campos, incluida la salud”, dijo Colomé.

Sin embargo, resaltó que es fundamental utilizarla de manera ética, transparente, equitativa y responsable.