¿Por qué los urbanos no han salido del patio?

Los artistas urbanos del país tienen una asignación pendiente: llevar su carrera a un paso más y cruzar fronteras, más allá de los típicos lugares donde la comunidad dominicana está radicada en los Estados Unidos y Europa. Sobre este tema, varias voces expertas han dado su versión. Santiago Matías, conocido como Alofoke; el locutor de Mortal 104.9 FM, Brea Frank; el empresario puertorriqueño Raúl López, y el mánager y productor Giordano Landrán, debaten en torno al tema.

Cuatro versiones diferentes, y distintos puntos de vista, aunque los cuatro expertos coinciden en un punto: se necesita dinero para lograr la internacionalización que aún no se da con los urbanos del país. Cuando hablamos de internacionalización, no solo es ir a cantar a un país, también abarca el estar presente en mercados no tradicionales, en premiaciones internacionales y en los chart de música internacionales, aclaró Brea Frank.

Para lograr aunque sea promover un tema musical como se debe internacionalmente, se necesita por lo menos invertir entre US$35,000 y US$70,000 dólares. Así lo aseguró el disquero boricua Raúl López a LISTÍN DIARIO.

“La gran mayoría de los artistas dominicanos, incluyendo los urbanos, a veces carecen de un andamiaje, o de un equipo efectivo, en un mercado tan complicado y tan grande como el americano, para hacer el trabajo”, sostuvo el representante del sello disquero MVP, cuyas oficinas están sentadas en Puerto Rico.

No tienen apoyo Mientras que Santiago Matías recordó que el mayor freno que tienen los artistas locales para competir con internacionales como J Balvin y Maluma lo hacen ahora, es que “trabajan de manera independiente. Las disqueras tienen el motor, para lograr todo eso, poder colocar los artistas en premios internacionales y mucho más”, aclara Alofoke.

Para Brea Frank, todo tiene que ver con la poca conciencia que tienen los artistas del patio en torno a la internacionalización y la importancia para su carrera.

“Es sencillo, los artistas locales, en su mayoría, se preocupan más en conseguir 100,000 dólares para comprar un carro de lujo que invertir en promocionar su música internacionalmente”.

Del país uno de los pocos que ha “sacado la cabeza” fue Don Miguelo, que con el tema “Como yo le doy”, logró el remix con Pitbull y pudo estar incluso en premios internacionales, pero a juicio de Brea, Don Miguelo no capitalizó eso como debía.

Aunque Giordano Landrón, mánager por muchos años de Don Miguelo, entiende que el lenguaje que han utilizado muchos de los urbanos dominicanos, no les ayuda a trascender internacionalmente; para Santiago Matías eso no es una limitante. Más bien, el director de Alofokemusic.net, piensa que si hay una limitante, es la que tiene que ver con el género que hacen. “Muchos se han limitado musicalmente, porque creen que en los barrios solo se consume dembow”. Un ejemplo de que no tiene nada que ver con las letras es el tema “El taxi”, de Sensato, que se pegó y está por todos lados.

“La música la tenemos, no tiene que ver con las letras el que no hayan podido trascender internacionalmente, porque la música no tiene lenguaje”.

El que solo los urbanos tengan presencia en mercados habitados por los dominicanos, como Nueva York y algunos estados más de Estados Unidos, y no hayan cruzado las verdaderas fronteras se debe, según Giordano, a que el género urbano en el país es una música nueva, “es un movimiento muy nuevo y está en crecimiento”. Pero está de acuerdo con Vakeró cuando señala que se trabaja poco esta parte en la carrera de un artista local porque “eso conlleva mucho tiempo, esfuerzo y dinero”.

(+) LO QUE PIENSA UN ARTISTA SOBRE EL TEMA Vakeró tiene una propuesta con un corte tropical lleno de fusiones. Esta ha sido merecedora de muchos elogios, hasta de artistas de otros géneros y grandes en la música local y latina como Juan Luis Guerra, quien reconoció públicamente la calidad de lo que hace el intérprete del “Hombre gris”, que vuelve a apostar a las raíces con el lanzamiento en el día de ayer de un hip hop “La chapa y colmado”.

Sin embargo, la experiencia del artista de San Pedro de Macorís ha sido la siguiente: “Yo soy mi propio inversionista, yo soy un poco complicado a la hora de hacer negocios porque me han engañado mucho. Se me acercan muchos inversionistas, pero lo estudio con mucho cuidado. A mí me atrasó un poco la parte internacional, el hecho de que no podía viajar por muchos años”. Sostiene que su música anda corriendo por todas partes, a diario “recibimos mensajes y correos de gente en México, Colombia y otros países”, promete trabajar ese punto.