DÍAS DE CINE
Detective Willy
ESTRENOS DE LA SEMANA
Usted va a ver esta película de José María Cabral y, al salir, es muy posible que le esté flotando en la cabezota algo como “vaya, qué buena idea tuvo José María”.
En efecto, insistimos entonces, eso fue precisamente lo que estuvimos pensando casi desde el mismísimo inicio de esta historia: que es una buena idea para plantear una parodia sobre las cintas de detectives privados al estilo Raymond Chandler y su Philip Marlowe.
Pero... ahí viene eso, el tal pero.
Porque en cine, un filme, no puede limitarse a un punto de partida por genial que sea, y entonces, cuando comienza a activarse ese relato en el cual vemos que el simple policía de aldea Willy se la pasa soñando con ser un detective como el que ve en una película, cuando se mezcla el discurrir diegético del Willy real con la vida fantasiosa del personaje del filme admirado, empiezan los problemas.
Y que haya momentáneas confusiones es lo de menos, porque eso se resuelve.
El problema es el desarrollo de la historia, que comienza bien cuando, en la confusión de los papeles que ordenan el destino de Willy y el de el oficial Brus García, nuestro héroe va a dar a Santo Domingo y a una unidad especializada en investigaciones de la policía, unidad que al parecer no dispone de archivos (en esta era digital, resoplas) para verle la cara a un designado real y confrontarlo con el otro.
Pero, bien, pasamos ese “detallito”.
Pero es que se suceden los “detallitos”, es que eso de que Willy quiere meterse en la piel de un detective está bien, pero que también se meta en la de Hamlet en plena presentación de Shakespeare en el Teatro Nacional nos luce un dislate, y que se meta en la casa de la villana y aparezcan luego sus amigos de la unidad está algo forzado, y que se trepe en un helicóptero está bien, total, si lo han hecho docenas de “héroes” de Hollywood por qué carajos no puede hacerlo Fausto Mata, pero, que se meta en el aparato sin que el que está adentro se percate estando a un metro de la puerta... ¡diantres!
Hemos citado apenas unos cuantos detalles. Pero, si nos pusiéramos otra vez a visionar con calma el filme, lo más probable es que aparezca una docena más, porque el problema de este relato cinematográfico es ese, que parte de una buena idea pero su puesta en escena cojea, y en lo que se refiere a la coreografía de los enfrentamientos, recordando a Wong Kar Wai, se nos cae el asunto por lo flojos y desteñidos.
De todos modos, por lo menos, a pesar de sus huecos y baches, Cabral y su coguionista Penélope Adames cuentan una historia de corrido, lo cual ya es algo por encima de la mayor parte de las comedias que hemos visto en estos meses. Además, está mejor actuada, Fausto Mata demuestra que puede hacerlo bien cuando su personaje tiene algo de consistencia. Los demás por igual porque sus personajes tienen más densidad y están formalmente correctos sin mucha bulla.
Cabral aduce que tenía meses escribiendo el guión.
Esperamos que el próximo lo acune más tiempo y lo cuide más en su puesta en escena.
FICHA DE EVALUACIÓN Detective Willy.- Dirección: José María Cabral Guión; J.Ma. Cabral y Penélope Adames Fotografía: Hernán Herrera Musicalización: Rita Indiana Intérpretes: Fausto Mata, Anthony Alvarez, Crystal Jiménez Vicens, Denise Quiñones, Claudette Lalí.