‘’Mundos paralelos’’ de Graciela Pérez
Justamente allá encima del relámpago, el techo de la tormenta desviste la luz.
Con este contemplativo escenario inicia la colección de poemas ‘’Mundos paralelos’’ de la maestra, bailarina y poeta dominicana Graciela Pérez. La obra fue publicada en el año 2015 con motivo de la XI Feria Regional del Libro Hermanas Mirabal 2015. Ambas, obra y autora, pertenecen al Movimiento Interiorista: corriente literaria encabezada por el Dr. Bruno Rosario Candelier que revela las impresiones de la sensibilidad y la conciencia a través de la poesía.
En su obra, la autora traza un puente entre lo imaginario y lo real mediante metáforas, imágenes y alegorías permitidas solo en el mundo de los versos. Quien lee sus creaciones aseguraría que se trata de una poeta metafísica, poseedora de un saber oculto revelado a través de las alas de la poesía. En versos como ‘’el latido mudo de la vida’’, ‘’entre un tiempo y otro espacio’’ y ‘’viajo en un haz de luz’’ se transparenta la sensibilidad de Pérez ante los misterios escondidos en el espacio natural en el que evidentemente se complace.
Las palabras que danzan en ‘’Mundo paralelos’’ parecen ser la exégesis de la vida que se le revela a la autora. Pero ¿quién o qué se lo da a conocer? Cada uno de los breves poemas que conforman la obra responden: la tierra, el sol, la luna, el rayo, el tiempo, tu cuerpo, el mío… Se trata de una poesía fruto de un encuentro entre la realidad material y aquello que no es percibido por la mayoría. La autora encuentra en las situaciones más extrañas; en los detalles más nimios de su mundo, el sentido de las profundidades de su ser.
Ese mundo ajeno y desconocido que plasma Pérez en sus poemas es totalmente opuesto a la realidad sensible que puede palparse, olerse, verse, saborearse… Aun así, ambas realidades viajan en una misma dirección; aunque no se encuentran en un punto concreto, una existe junto a la otra. Esto es, misterio y verdad permanecen siempre a la par: son mundos paralelos.
Asimismo, se intercalan en los versos de la obra emociones y sentimientos como la pasión, la angustia, el anhelo, el amor y la pérdida mediante imágenes del espacio natural que rodea la voz de la poeta. Así, la unión de los átomos representa el lazo indisoluble de los amantes; la lluvia que cae, la agonía de quien espera, y el sol que nace, la esperanza de quien ama.
Se aprecia, además, la capacidad que tiene la obra de ensalzar las pequeñeces del mundo y perfilarlas como los tesoros de la vida misma. Allí, en el ‘’techo de la tormenta’’, en el ‘’cuello del árbol’’, en ‘’la mirada del sol’’ y ‘’los acordes de los grillos’’ descansan los enigmas que en nuestro paso por el mundo buscamos descifrar. Pérez torna refinadas las situaciones ordinarias e insípidas de la cotidianidad y las convierte en fuentes vivas de trascendencia y filosofía.
Se vislumbra en el poemario, también, el anhelo por el ser amado. Muchas veces, el amado que no puede ser hallado o tenido. No obstante, en un universo donde realidad e imaginación viajan juntos, no queda otra opción que habitar en el otro desde otro tiempo y espacio o, lo que es mejor, en un nuevo tiempo y espacio creado por ambos, como lo expresa Pérez en los siguientes versos de su poema ‘’Dio’’ (p. 18):
Viajamos de una a otra posición
para encontrarnos desde nuestros mundos paralelos,
en un tiempo nuestro.
diferente,
[…]
para unir nuestras bocas en un solo aliento.
En esencia, la obra acerca al lector a un atisbo de la insondable mirada de la autora a su mundo; descrito en un lenguaje sencillo, pero penetrante y trascendente. Todo lo expuesto supone una propuesta que, contraria a las leyes naturales, traspasa lo tangible para acercarse a lo que no puede percibirse. Es una filosofía de vida expresada a través de la poesía. Una visión rica y deleitable en el que cada lector podrá, también, crear su propio tiempo y espacio.
Sin duda, el patrimonio expresivo de Pérez supone la habilidad de una interpretación abierta y honda de la realidad. Es decir, que conlleva dejar a un lado los moldes que conforman nuestra cosmovisión para dar paso a nuevas formas de analizar y exteriorizar nuestro yo junto al del otro. El lector de ‘’Mundos paralelos’’ debe estar listo para verse enfrentado a incoherencias, desatinos y absurdos que, antes que entorpecer, llenarán de significado su lectura. Asimismo, debe prepararse para enamorarse en el camino de la complejidad de lo simple; de la lógica de lo irracional. Es una excelente ocasión para permitir que se nos revelen los misterios de nuestra existencia en una esfera poética donde el viento, el sol, la luna y las estrellas serán testigos de nuestro viaje.