¿Por qué necesitamos la fantasía?

Una frase del escritor infantil y juvenil alemán Michael Ende, dice: “La fantasía no es una forma de evadirse de la realidad, sino un modo más agradable de acercarse a ella.

Conocí la obra de este escritor en Primero de Secundaria (anteriormente Séptimo grado de básica), cuando nos pusieron a leer “La Historia Interminable” (1984), un libro simple y complejo a la vez, que trata las aventuras del niño Bastián Baltasar Bux en el reino de Fantasía, que se encuentra dentro de un misterioso libro titulado “La Historia Interminable”. El libro me pareció algo confuso desde el principio, pero luego, no queríamos que se acabase. Dicho libro ayudó un poco a descubrir mi pasión de la lectura.

Dicho libro, parecía ser escrito como un libro más personal para el autor, debido a que enseñaba muchas cosas a través de hechos fantásticos, y al mismo tiempo una deconstrucción realista del personaje de Bastián. Además de ello, él entiende que el libro también sería dirigido hacia un público adolescente y adulto, debido a que el personaje pretende ser un adulto, cuando en realidad no hay necesidad de que lo sea aún.

“La historia interminable” (en otrras palabras, el mundo que había creado el autor) resultó ser mucho más mágico, difícil e impredecible de lo que parecía. Tomando el antiguo método de la inspiración divina y escribir exclusivamente con la guía de imágenes poéticas, el proceso de escritura duró algunos pocos años, aunque dichos años resultaron en una concentración que lo volvió casi loco. En sus palabras, él no sabía cómo Bastián podría escapar de Fantasía.

Sin embargo, con el tiempo descubrió que la salida era interior, y se encontraba en el centro de Fantasía y, por tanto, resultó en la conclusión de que la mayoría de las cosas se resuelven de un método que parecerá absurdo, pero que con el debido pensamiento, se comprende. En una entrevista para el Periódico El País, dice: “Cuando nos fijamos un objetivo, el mejor medio para alcanzarlo es tomar siempre el camino opuesto. No soy yo quien ha inventado dicho método. Para llegar al paraíso, Dante, en su Divina comedia, comienza pasando por el infierno. […] Para encontrar la realidad hay que hacer lo mismo: darle la espalda y pasar por lo fantástico. […] Sin embargo, hay siempre. un riesgo cuando se realiza tal periplo; entre la realidad y lo fantástico existe, en efecto, un sutil equilibrio que no debe perturbarse: separado de lo real, lo fantástico pierde también su contenido.”

Y es tal como muchos dicen, que la fantasía se requiere para comprender mejor la verdad: que la ficción sirve para transitar mejor por nuestra vida.