¡Viva Cuba!

Los personajes principales son dos niños, Malú y Jorgito. Sus familias son rivales, por las clases sociales que les distingue y le prohíben verse, aun así ellos se han prometido una amistad eterna.
Al momento en que la mamá de Malú decide emigrar de Cuba, su hija se propone todo lo contrario, quedarse. Es aquí cuando inicia una trayectoria por distintos lugares. Ambos infantes escapan de sus casas e inician una aventura, dispuestos a que nadie acabe con su amistad.
La película dirigida por Juan Carlos Cremara e Iraida Malberti, fue la primera producción cubana en ganar el ‘Grand Prix Écrans Juniors' para cine infantil en el Festival de Cine de Cannes 2005.
Es un filme que expresa el punto de vista de los niños con respecto a la emigración y la situación en Cuba. En las escenas se perciben mensajes simbólicos, sobre todo el final, cuando los niños se paran en lo alto del acantilado, abrazados y se lanzan, se suicidan. Aunque es una conclusión incierta porque no se sabe lo que pasó con exactitud, revela la incertidumbre de los cubanos por no tener la certeza de la que pasaría con el futuro de su país.
¡Viva Cuba! ha ganado 34 premios nacionales e internacionales.