Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

POR SU PROPIA CUENTA

La maleducada

“EN REPÚBLICA DOMINICANA ES DIFÍCIL SER NEGRA, MUJER, ARTISTA E ISLEÑA”, AFIRMA ISABEL SPENCER, DIRECTORA TEATRAL

Isabel Spencer no teme al qué dirán y por eso puede resultar malcriada para muchos. Con apariencia fuerte y decidida esta teatrista independiente, creadora del colectivo de teatro “Maleducadas”, eleva con cada apertura del telón su lucha por los derechos de las mujeres hasta esta rama del arte escénico. ¿Porqué una mujer como tú elige el teatro?Soy de Puerto Plata, llegué a Santo Domingo a estudiar publicidad en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), pero en ese proceso me di cuenta que eso no era lo que más me llamaba la atención y empecé a asistir a la escuela de Bellas Artes. Luego dejé la carrera y empecé a estudiar teatro como profesión. Más adelante, ingresé a la Compañía Nacional de Teatro y duré 10 años trabajando como actriz y en todo ese tiempo fui adquiriendo mucha experiencia, con presentaciones y pequeños trabajos independientes. No he parado de trabajar desde que estuve preparada para hacer teatro. ¿Qué significa para ti este arte?Ha salvado mi vida, lo veo como sanador y curador. Todas las personas deberían tener contacto con el arte, en diferentes vertientes. En este mundo tan carente de sensibilidad la gente necesita contar con ese aliciente y ese antídoto refrescante. Yo encontré una manera de expresión, llegar al teatro es como estar mi casa, siento que pertenezco ahí. ¿Cómo surge la idea de “Maleducadas”?Con el tema de Maleducadas, colectivo que fundé y del cual soy directora, fue un poco como montar un grupo de mujeres para expresarnos, poder hacer cosas por nosotras mismas y ponernos de acuerdo para unificar una voz. Mi lucha siempre va enfocada hacia el empoderamiento de las féminas, hacia el crecimiento y la visibilidad del trabajo de las actrices jóvenes en el teatro. ¿Cómo recibe el público criollo, un teatro con propuesta de género?No me puedo quejar, siento que han sido muy receptivos y me lo han manifestado al asistir a ver el trabajo. He encontrado muchas personas colaboradoras, tanto mujeres como hombres. No he llegado a donde quería, pero me siento contenta de ir trillando ese camino. Entre resistencia y sumisiónEl mundo está diseñado para comodidad de los hombres, para que estén en las instancias de poder, aunque esa realidad se hace menos fuerte cada día debido a que la mujer ha escalado peldaños dignos de admirar. Se está reafirmando en sus espacios de dirección, en capacidades de accionar, en trabajos que ameritan esfuerzo intelectual y físico ódice Spenceró pero persiste una estructura donde hay un cierto favoritismo con el tema masculino. Para la artista, esta desigualdad no se escapa al tema de la preferencia sexual. “Es difícil en este país ser negra, mujer, artista, e isleña. Con esas condiciones sacar la cabeza a flote es duro, porque tú tienes todos los números jugados”, destaca. Por tal motivo, Spencer expone que el antídoto a este mal se encuentra en la resistencia. “Hay que visibilizarse, seguir trabajando, sacando propuestas, hay que seguir dejándose lo’ moño’ como a uno le da la gana óafirma sin dudar. Spencer se muestra como una firme creyente en que cada quien cumpla su sueño y que lo logre sin importar cuál sea su orientación sexual, raza, o color y, con determinación, expresa que “hay otros mundos posibles”. Añade que en el país se debe empezar a trabajar con el tema de las diferencias, pero no desde la tolerancia, sino con el respeto. Ante todo esto, la cuestiono para saber si el poseer las características anteriores la ha convertido en objeto de discriminación dentro del ambiente teatral. Ella responde: “En el teatro hay una exclusión invisible, que es muy peligrosa y aquí se maneja mucho y no es que uno ande paranoico, pero si la hay. Eventualmente si han pasado casos e incluso hay posibilidades que todavía no he tenido al alcance de mi mano por ser todo lo anterior. Algo que me ha funcionado es que no tengo problema de esconder lo que soy y cuando tú te empoderas de lo que eres te tienen que respetar”. ¿Cuál ha sido la experiencia más gratificante en tu carrera?Lo más importante fue la primera clase que tomé en teatro. Después, encontrarme con mis profesoras, mujeres brillantes que me enseñaron lo que sé: María Castillo, Carlota Carretero, Bethania Rivera, Xiomara Fortuna y Marily Gallardo. También agradezco a mi mamá Amparo, a mis amigas, tengo mucho que reconocer a las mujeres porque he sentido su solidaridad y su entrega.. ¿Qué necesita el teatro en RD?El soporte económico siempre es necesario. También que la gente que apoya crea en las propuestas de los jóvenes y de las mujeres y que sigan abriendo espacios de teatro alternativo y nuevas salas para que la gente pueda ir a ellas. ¿Cómo examinas tu propuesta teatral a futuro?Muchas de las actrices del grupo Maleducadas están en su tiempo de irse a estudiar con becas, salir del país y yo sé que lo pueden hacer. Estoy feliz por ellas ya que es su tiempo para formarse. Veo a mi colectivo como un espacio de tránsito y espero que por él puedan circular muchas mujeres, que lleguen con nuevas ideas y, que por añadidura, se lleven varias propuestas. ¿Qué deseas alcanzar?La dirección de teatro me tiene apasionada. Soy actriz y tengo mucho tiempo actuando, pero ahora tengo el deseo de experimentar en la dirección, para poder tener un discurso más fuerte. Quisiera alcanzar la inmortalidad para no dejar de hacer teatro nunca. Asimismo, quiero salir del país a estudiar algo, ya que sentirte presa dentro de una isla es difícil. EmpoderamientoSi te dejas amedrentar terminas como una cucaracha aplastada... Estas palabras podrían definir la lucha de una mujer, que por su propios meritos ha logrado retribuir al sector femenino un empoderamiento que tanta falta le hace: “Me gusta el que las universidades estén llenas de mujeres. Estamos teniendo menos miedo de afrontar las cosas y estamos siendo cada vez más nosotras mismas y definiendo donde queremos estar”. ¿Qué recomienda entonces Spencer a una mujer que posea “los cinco golpes”? La directora no duda siquiera un instante para responder con una sola palabra: resistencia. “En la firmeza está el poder, persistencia en lo que quieres hacer tratar de alzar tu voz y decir yo existo y estoy haciendo estoóexpresaó. “Hay que levantarse todos los días con la mente clara de lo qué quieres, y de para dónde vas” Para Spencer la mujer no pueden vivir de espadas a lo que acontece en su entono: “Hay que saber lo qué está pasando con las mujeres en el barrio, con las lesbianas, las artistas, las campesinas, las mujeres de clase alta, las madres solteras, las amas de casa, con todas”.

Tags relacionados