REINVENTAR LAS EDITORIALES

Entre obstáculos y posibilidades

Tras examinar las opiniones de escritores y escritoras de distintas generaciones sobre la “reinvención del mercado editorial dominicano” esta vez toca el turno a los editores.

El Grupo Santillana (Prisa Ediciones República Dominicana) se compone por los sellos de marca internacional Alfaguara, Taurus, Alfaguara Infantil, Alfaguara Juvenil, Aguilar, Suma y Punto de Lectura. De acuerdo a Ruth Herrera, directora de Prisa Ediciones, el mayor reto que enfrentan en RD es que sin lectores no hay mercado editorial. “Otro es el desarrollo y expansión de internet y los dispositivos digitales, un territorio libre paralelo al tradicional mercado editorial. Y hay que convivir con los libros-PDF, ‘obra’ de piratas que no da tregua”, advierte. Para incrementar la demanda en la población, Herrera considera que se debe empezar a leer libros desde niños y que para eso se necesita un mejor sistema educativo. “Luego a los autores hay que darlos a conocer, promoverlos y venderlos, o sea despertar el interés por su obra. He leído y oído críticas absurdas al marketing que hacemos las editoriales”, dice. “Sin estas campañas, ¿cómo se atrae al público, cómo se pegan los nombres de los escritores, invisibilizados por tantas figuras mediáticas de la música, los deportes, del cine y la televisión, de la sociedad rosa, de la política?”, agrega. Sobre cómo su sello ayuda a los escritores criollos dice: “Publicamos autores dominicanos. Somos una editorial con todas las de la ley. Pagamos adelanto y regalías a los escritores en función de sus ventas. Leemos numerosos textos, evaluamos y escogemos los que consideramos más adecuados y más merecedores de conocerse por su nivel de calidad. Nuestros procesos de corrección y revisión son exhaustivos; editamos tomándonos en serio el asunto y de la mano con el autor, que tiene la ganancia de trabajar con un editor. Difundimos y promovemos su persona y su obra”. InstitucionalDe acuerdo a su página web, Editorial Funglode posee la misión de difundir el pensamiento de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode) a través de publicaciones que fomenten el progreso y fortalezcan la democracia y el desarrollo sostenible del país. Al igual que Herrera, Noris Eusebio Pol, directora de este sello, afirma que el principal y más difícil desafío que enfrenta el mercado editorial en el país es que los dominicanos no leen mucho. Además de este, señala otros retos. El primero la alta oferta digital gratis, con la que se consiguen muchos artículos y libros sin costo, legal o ilegalmente subidos a la web. Y el segundo, lo caro que sale el publicar versus el ritmo de recuperación de la inversión. Para aumenta los niveles de lectura, sugiere que las editoriales apuesten a ediciones baratas accesibles a un mayor número de población, debido a que un precio bajo también invita a leer. Sobre el financiamiento a los literatos dominicanos, destaca que es cierto que el apoyo para publicar todavía no es suficiente y que los mecanismos para someter una obra y que esta logre convertirse en libro no son tan eficientes y transparentes como se espera. “La bibliografía dominicana de calidad sigue creciendo, pero no hay una investigación realizada que nos permita hablar con propiedad sobre ello. Me refiero no solo a bibliografía tipo novela, cuento o poesía, sino a todo libro escrito por dominicano, ciencias sociales en general, periodismo, historia y otros géneros”, reflexiona. Para continuar en el orden institucional, se encuentra Ediciones Ferilibro conocida como “la voz editorial de la Dirección General de la Feria del Libro y del Ministerio de Cultura”. Pedro Antonio Valdez, director ejecutivo de la Feria del Libro, dice que RD no ha contado con una industria editorial sólida. Sin embargo, según expone, eso no ha imposibilitado que autores como Juan Bosch, Pedro Mir, Aida Cartagena Portalatín, Franklin Mieses Burgos, Jeannette Miller, Rita Indiana Hernández, entre otros, hayan sido bien difundidos. “Los buenos escritores siempre tendrán su público. El mercado editorial dominicano es víctima de los bajos índices de lectura característicos de nuestro país, así como del “efecto sucursal” de las grandes editoras”, reitera. “Entiendo que hay que hacer menos bulto, invertir más en el análisis y el pensamiento de la escritura. Callar y escribir, hasta que la cosa no pueda madurar más y haya que dejarla caer de la mata”, asegura. IndependienteDe acuerdo a su creador, Noé Zayas, Ángeles de fierro se fundó en el año 2002, como una repuesta editorial para los escritores de provincias, esencialmente en la región Norte del país. Según expresa el escritor, la intención de que esta editorial surja como una respuesta, se da por el poco o ningún apoyo del Estado y del sector empresarial, a la actividad literaria, en especial a la poesía. No posee fines de lucro. “Los libros que editamos nunca nos han dado un resultado de devolución de su gasto, en función de que los mercados de la literatura en el país son muy limitados y solo en la Feria del Libro hacemos una venta popular de textos a 5 y 10 pesos. Estos de la cantidad de libros que se nos van acumulando”, explica Zayas. Por su experiencia en el área Zayas dice que el público tope que adquiere textos de poesía es de 200 personas. Dice que se debe crear una política educativa que integre en los planes de lectura en las escuelas y universidades, textos de autores, sobretodo jóvenes, y dominicanos. Generalmente en los centros educativos ponen a leer María, El Principito o textos muy antiguos. “Además, conozco pocas editoras que en RD puedan comercializar de manera eficiente un libro y pagar derechos de autor sin perder en el intento”, refiere. “Las que tratan de hacerlo fracasan o se desacreditan”, agrega. En la webEl mundo editorial en RD empezó a tener presencia en los medios electrónicos. Tal es el caso de Ediciones de a poco y de la librería virtual tulibro.do La primera se define como “una propuesta editorial dedicada a la literatura y a los libros visuales que busca publicar obras originales que cuestionen e inviten a comprender la realidad contemporánea dominicana y caribeña”. Mientras que tulibro.do es una tienda online en el país, donde los lectores y consumidores en general pueden encontrar los títulos más destacados a nivel nacional e internacional. David Puig, director de Ediciones de a poco, expresa que República Dominicana ignora los libros. Según opina, que un grupo reducido de personas compre los clásicos de la literatura dominicana o que algunos autores consigan vender 1000 ejemplares de sus libros subvencionados por instituciones del gobierno a otras instituciones del gobierno o amigos, no es suficiente para hablar de un mercado. “No se trata de apostarle a un mercado del libro que no ha existido y probablemente no vaya a surgir nunca en nuestro país, sino de encontrar la forma y los recursos para generar a través del trabajo editorial cierto tipo de energías y de conversaciones”, especifica. “Cada libro que hemos hecho (y los que estamos haciendo) en Ediciones De a Poco ha sido un desafío pesado y feliz, algo así como empujar el peñón de Sísifo bailando bachata”, añade. Mientras que para Joan Guerrero, Gerente General de Innova Internet, el mercado editorial criollo es uno de los más activos en el Caribe. “Contamos con escritores y escritoras que dinamizan el sector con creaciones de diversos géneros y cada mes, no nos quedamos rezagados al ver parir entre 5 a 10 obras, sin importar qué tan grande sea o qué poco experimentado sea el autor”, comenta. Entre los retos, señaló como principal el promover más a los autores criollos. “Ante la poca plaza de librerías, naciendo nosotros en abril de este año, queremos dar un escape: nuestra página es la tienda de libros por internet que el público dominicano esperaba, una alternativa local con precios económicos y una disposición más a favor de las nuevas tecnologías: la literatura actual sí converge con las redes sociales, con el compartir entre escritores y lectores”. A pesar de su apoyo a los escritores locales, Guerrero reconoce que los autores internacionales son promocionados por tulibro.do como negocio, al ser más rentables y más populares entre un público de mayor alcance. CambiosReinventar las editoriales puede ser, para muchos, un simple mito. Aunque al igual que en otros reportajes de esta serie los entrevistados ofrecen una posible solución a los problemas que enfrenta este sector en RD. Guerrero afirma que el Internet es el aliado principal: no solo en que abarata más costos y hace que las obras sean más asequibles para los lectores dominicanos, sino que pueden ser más originales, acaparar nichos de mercado y a una audiencia más joven que desea ñy tiene el poder adquisitivoñ para comprar libros ya sean dominicanos o extranjeros. Mientras que Herrera asegura que en el mundo globalizado ya lo hace. “Es posible que el modelo de editorial conocido hasta ahora ñel de libros en papel- se esté tornando limitado ante las posibilidades abiertas por la tecnología. Hay que pasar a producir libros digitales con todas las aplicaciones interactivas y multimedia que van desarrollándose, a la vez que se publican libros impresos. Siempre habrá parcelas de la población que gustarán de los libros y seguirán comprándolos y atesorándolos”.

(+)DIVERSAS PERSPECTIVASRuth Herrera: “Los escritores no deben financiarse sus libros, pero con frecuencia no tienen más remedio que hacerlo. Hay apoyo, obviamente no suficiente para satisfacer a todos. También habría que distinguir entre escritores con vocación, talento y trayectoria”. Noris Eusebio- Pol: “En la cultura dominicana, el control es percibido fuera de nosotros, esperamos que lo deseado nos llegue de arriba, del gobierno, de la empresa, de fuera, etc. y eso afecta mucho la autogestión”. Pedro Antonio Valdez: “Se debe apostar a la calidad. No es cierto que, como decía el anuncio, ‘todo lo dominicano es bueno’”. David Puig: “Para un pequeño editor es casi imposible lidiar con la burocracia de algunas librerías que parecen imitar las peores prácticas de la administración dominicana”.

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