Opinión
¡La dicha de tenerlos!
Es conmovedor ver a un nieto y un abuelo ser inseparables, en los ojos del abuelo es como disfrutar en miniatura, la versión extendida de sus años; y en la mirada del nieto o nieta es como tener un papá reforzado de doble experiencia, cabello blanco, paciencia, sonrisa indeleble, consejos, dulzura y amor.
Leí una frase que decía que no necesitas un libro de historia si eres lo suficientemente afortunado de tener un abuelo, y es que prestar atención a sus anécdotas es como escuchar en vivo a un testigo que vivió los hechos que construyeron el presente y la sociedad en la que vivimos.
Repasar sus vivencias una y otra vez, es saber el porqué de esos valores y tradiciones que cimientan tu familia y la hace única.
Aunque en algunos países tienen un día especial para celebrar a los abuelos, otros como el nuestro, los recuerdan junto a los padres, y es que lo son.
Tienen el doble título paterno porque aún no satisfechos con el rol extraordinario que hicieron por sus hijos, dan esa milla extra por su descendencia extendida, se convierten en niños otra vez para poder consentir, divertir y ser parte de la vida de sus nietos.
Hoy abraza a tu abuelo, agradécele por tantas enseñanzas, reconoce su labor al formar a tus padres, y recuérdale lo importante que ha sido en tu vida. No son eternos, lamentablemente, no siempre estarán ahí, la ley de la vida un día hará que su valiosa presencia sea un recuerdo. ¡Qué lindo es que sepan lo mucho que aprecias su existencia y lo feliz que estás de tener un papá con doble experiencia!
Desde aquí se lo expresamos en cada página: ¡Felicidades a los padres y abuelos dominicanos!