PEREGRINANDO A CAMPO TRAVIESA
¿Vas a bautizar? Siete sugerencias
Ustedes le dieron la vida a ese niño, porque valoran la vida. Antes de bautizar, aclárense si ustedes valoran la fe. No bauticen por convención, sino por convicción. A todos nos hace bien escuchar esta queja de Jesús: “este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí” (Mateo 15, 8 – 9).
El sacramento del bautismo inicia con esta pregunta: “al pedir el bautismo para este niño, ¿saben que se obligan a educarlo en la fe?”. Ese niño vivirá, por un tiempo, apoyándose en sus vidas y creerá por unos años apoyándose en su fe. Responsablemente ustedes se han ocupado de que cada minuto se pueda apoyar en su vida. Si valoran la fe, den los pasos necesarios para que también se pueda apoyar en su fe.
Que su bautismo no sea un evento puntual, sino parte de un proceso. Nadie se toma el trabajo de sembrar un árbol para dejarlo abandonado. En los primeros tiempos, exige un cuidado diario: agua, nutrientes y preservarlo de plagas. Cuiden la fe que han sembrado con el agua de la práctica de su fe, los nutrientes de la educación y los plaguicidas orgánicos de los buenos ejemplos.
Piensen en su bautismo, ante todo, como un evento eclesial, está entrando en la comunidad, la Iglesia, no en una página de Ritmo Social. Bauticen en su parroquia, para eso, conózcanla y participen en sus celebraciones y proyectos. ¿Vas a misa en otra parroquia? No importa, valora tu parroquia, comprométete con ella tal y como es. El marco más hermoso para el bautizo de su niña es la fe de sus padres, su familia, los amigos cercanos y su parroquia.
Es cierto que un bautizo requiere organización, pero lo más importante no es lo que ustedes organizan, sino lo que él recibe: el Espíritu Santo, su fortaleza, la unción que lo constituye en hijo de Dios, profeta y partícipe del sacerdocio de Cristo y la luz. Su niña será sumergida en la muerte y la resurrección de Jesús para nacer de nuevo.
Escoge un padrino y una madrina que les ayuden en su educación en la fe. Los padrinos no son para agradar y ganar compadres. Cuatro padrinos equivalen a ninguno.
Bautismo: vivir en la amistad para siempre con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

